En el marco de una campaña por la elección de autoridades para centro de estudiantes, las autoridades peronistas del colegio Nº 2 Rivadavia, ubicado en la localidad tresfebrerense de Ciudad Jardín, prohibieron que la lista 22 se presente con las firmas del Frente de Izquierda Unidad, junto a una lista de todas las ideas que debían censurar. La persecución llegó al punto de sacar de la mano de forma violenta los volantes que ya se habían repartido. Un claro ataque persecutorio y autoritario a la democracia estudiantil. |
Esta semana comenzó la campaña por el Centro de Estudiantes del Colegio Rivadavia en Tres de Febrero con un grave caso de persecución política por parte de los directivos. Las autoridades prohibieron que los estudiantes organizados en la lista 22, llamada Diego Cagliero en honor a un joven asesinado por la policía, se presenten con estudiantes referenciados en el Frente de Izquierda Unidad, obligaron a que tapen sus materiales ya impresos y hasta sacaron de la mano a los estudiantes que ya habían recibido los volantes. La persecución siguió por parte de Martina Quiroga, secretaria Gremial del SUTEBA, que presionó a que se firme un acuerdo de que no podían referenciarse en la izquierda en estas elecciones, con el apoyo cómplice del actual centro de estudiantes.
No es casualidad este ataque, la dirección intentó proscribir una de las listas en 2019. Tampoco es casualidad que persigan a los estudiantes de izquierda, la dirección es peronista y con cargos en el sindicato docente del SUTEBA. Quieren callar a la única voz que denuncia el ajuste, se solidariza con los docentes precarizados del ATR y que pelea por mejoras edilicias ante la desidia del municipio que dirige el macrismo y Kicillof. En este caso la censura supera todo limite, rozando el adoctrinamiento no permitían hablar del gobierno, de la marea verde y hasta de la ley de humedales.
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