Barricadas con hogueras, piedras o contenedores, cortes de vías, concentraciones y enfrentamientos con la represión de la Policía Nacional vuelven a sucederse en los principales nucleos industriales desde la mañana de este lunes.
Es la séptima jornada de la huelga indefinida del sector del metal de la provincia de Cádiz y la lucha sigue firme, mientras la represión del Gobierno se intensifica.
Desde las cinco de la mañana los piquetes han vuelto a cortar el tráfico de la carretera CA-34, que une La Línea de La Concepción y San Roque, donde están las sedes de varias grandes industrias del Campo de Gibraltar.
Esto a pesar del fuerte dispositivo policial que trata de garantizar los accesos a las fábricas, que cuenta hasta con vehículos blindados y que ha sido reforzado estos días por el Gobierno “progresista” del PSOE y Unidas Podemos con nuevos efectivos.
Fuentes sindicales señalan que autobuses con trabajadores se han dado la vuelta por los cortes y desde Navantia también han confirmado ausencias por los piquetes.
De esta manera, como ha señalado la Coordinadora de Trabajadores del Metal de la Bahía de (CTM), las actuaciones y presencia de los piquetes en Cádiz y San Fernando eran prioritarias, como se ha podido ver en la madrugada de esta séptima jornada de huelga indefinida en la provincia.
Desde los astilleros trabajadores de Navantia han recorrido las calles de Cádiz, llegando al edificio de la patronal, con tensión y enfrentamientos con la policía.
El conflicto y las movilizaciones en solidaridad se extienden por Andalucía, en Sevilla ya se ha convocado una concentración en apoyo a la huelga, la tarde de este lunes a las 19 horas en el Palacio de San Telmo. Las muestras de solidaridad se extienden también por todo el Estado.
Todas las organizaciones sociales, políticas y sindicales de la izquierda debemos apoyar esta heroica lucha de la huelga del metal, así como denunciar que el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos está utilizando las fuerzas policiales para reprimir a los trabajadores y garantizar los accesos a las fábricas, en beneficio de la patronal de FEMCA que se niega aceptar las justas reivindicaciones de los huelguistas. |