La alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti ( RD) está elaborando un plan de seguridad comunal que incluye la regulación del comercio ambulante para afrontar la temporada de verano y la llegada de los diferentes turistas, argumentando que “el espacio público se debe proteger”, reforzando a su vez la vigilancia en las áreas desocupadas por la fuerza pública.
Estas acciones terminaron con protestas por parte de los comerciantes ambulantes de Avenida san Martín, quienes protestaron por el retiro de sus elementos de trabajo en el sector.
Ripamonti replica una salida clásica frente al trabajo informal fortaleciendo métodos punitivos ¿un golpe a los sectores obreros y populares?
Tras la pandemia, la cesantía aumentó y con esto las condiciones de vida empeoraron, las cifras de poder acceder a un trabajo formal disminuyeron, lo cual hizo que cientos de personas destinaran su tiempo al trabajo informal . Frente a esto, en vez de solucionar este problema que atañe a los sectores mas populares de la comuna, la alcadesa del frente amplio aplica medidas de gestión que nada tienen que envidiarle a los partidos del régimen. Planes conjuntos con carabineros, realizando desalojo a los vendedores ambulantes, argumentando que “el espacio público se debe recuperar” ,sin existir ningún plan concreto sobre que hacer con la cesantía, y la pobreza en la región, fortaleciendo métodos punitivos para erradicar con el trabajo informal.
Las condiciones de vida del pueblo trabajador en la quinta región no mejoran, y el aumento del comercio informal es prueba de ello. Frente a la cesantía urge un plan de obras públicas gestionado por el pueblo trabajador que incentive el empleo, sumado a la lucha por la disminución de la jornada laboral de 5 días 6 horas a la semana y el reparto de las horas de trabajo para que todos podamos trabajar. |