Sobre el mediodía de hoy efectivos policiales desalojaron violentamente a trabajadores del transporte organizados en el Sindicato Único del Transporte de Carga y Ramas Afines (Sutcra), en el acceso al puerto de Montevideo.
El reclamo de los trabajadores es sobre la situación salarial y las irregularidades en el cumplimento de derechos laborales. Señalan que la patronal mantiene al sector bajo una sobrecarga laboral y piden que el gobierno le exija a las empresas la información correspondiente sobre el horario de trabajo y las horas extras para fijar el convenio salarial.
Recientemente la policía reprimió a trabajadores del transporte colectivo de la empresa Copsa en las inmediaciones del Tres Cruces, con el resultado de trabajadores heridos por balas de goma.
No son trabajadores, son el brazo armado del estado
Al inicio de la represión la policía llegó a detener violentamente a algunos trabajadores, posteriormente hizo su aparición el presidente del Pit-Cnt Marcelo Abdala para “descomprimir” la situación: "Estábamos reunidos en la Mesa Representativa, me llamaron los compañeros del Sutcra. Nos dijeron de esta cuestión y hablé con el ministro del Interior. Le dije ’no repriman, dejame que voy a trabajar con los trabajadores, vamos a descomprimir’".
Como resultado se levantó la medida de corte a los accesos al puerto y según versión de Abdala sin trabajadores detenidos: "A la llegada nuestra, les sacaron las esposas. No vinimos a armar lío, al revés".
Marcelo Abdala pertenece a una de las corrientes sindicales frenteamplistas que defienden la permanencia del sindicato policial dentro del Pit-Cnt, razón por la cual intentan maquillar situaciones como esta. Cada vez que hay una represión contra el movimiento obrero y popular, no demoran en intentar desvincular todo lo que les es posible al sindicato policial y sus miembros de la violencia estatal. Incluso cuando el mismo sindicato ha respaldado acciones represivas contra trabajadores y sectores populares o cuando decidieron no luchar contra la LUC.
Aquí en Uruguay y en otras partes del mundo se corrobora que la existencia de los sindicatos policiales sirven para fortalecer a dicha fuerza represiva del Estado. La defensa corporativa que típicamente despliegan sus miembros va en consonancia con el poder político y estatal de fortalecer los medios de defensa de que dispone la clase capitalista. En los hechos aumenta la profesionalización, el equipamiento y sobre todo la impunidad de su accionar, naturalizando y avanzando en el abuso de poder.
El gobierno justifica la represión
El Secretario de la Presidencia Álvaro Delgado salió enseguida a justificar la represión y el marco legal que la posibilita con la LUC: "La LUC asegura la libre circulación, el derecho a la huelga y del huelguista a trabajar".
Cabe recordar que el artículo de la LUC que permite reprimir las medidas de lucha obrera como los cortes, es una ampliación y elevación a estatus de ley del decreto anti piquetes del gobierno frenteamplista de Tabaré Vázquez.
Hay que acabar con la LUC y sacar a la policía del Pit-Cnt
Sacar a los sindicatos policiales del Pit –Cnt se vuelve cada vez más evidente e imperioso, los ejemplos represivos se seguirán sumando y agravando, y no hay relato progresista que logre maquillar la cruda realidad del rol que cumplen las fuerzas represivas y sus sindicatos en esta sociedad.
El fortalecimiento para el accionar de la policía que otorga la LUC, la cual contiene varios artículos anti obreros, pone sobre la mesa la necesidad de un movimiento democrático anti represivo que se plantee acabar con la LUC, no solo en la próxima instancia electoral sino, proponerse liquidar esa ley reaccionaria en su conjunto mediante los métodos de lucha de la clase trabajadora, desde las bases y en las calles. |