Tras más de 14 horas de sesión y ocho votaciones, el pleno de la Convención Constitucional no pudo elegir la dupla que sucederá a Elisa Loncón y Jaime Bassa en la presidencia y vicepresidencia del organismo. A las 15 horas se retomará la sesión para un noveno intento de elección. Se rumorea que sería la doctora en Salud Pública María Elisa Quinteros quien se transformaría en la nueva presidenta del organismo, con un perfil similar a Cristina Dorador que estuvo a 6 votos de ganar en la séptima votación. Las tensiones son un anticipo de las dificultades que tendrá el organismo constituyente para responder a las demandas de la rebelión que siguen sin resolver.
Las tensiones comenzaron luego de que se rompiera momentáneamente el bloque entre el PS y el FA con un reportaje de Resumen.cl que daba cuenta de casos de corrupción que envolvían a Ramona Reyes, la carta PS que llevó el bloque para dirigir la Convención. No hay que olvidar que por responsabilidad de este bloque se aprobaron medidas tan odiadas como el quorum de dos tercios de la dictadura y cada una de las medidas del Acuerdo por la Paz firmado a espaldas del pueblo durante la rebelión.
Luego de que el FA le quitara el piso a Reyes, tomó fuerza la opción de Cristina Dorador, científica de Antofagasta y carta de los Movimientos Sociales quien estuvo a punto de salir electa en la séptima votación cuando apenas le faltaron 6 votos para alcanzar los 78 necesarios. También tuvieron altas votaciones Benito Baranda de Independientes No Neutrales, un colectivo cercano a la concertación. Sin embargo, ambas cartas se bajaron y no está del todo claro quién será la nueva directiva. Según trascendidos de prensa, habría un pre acuerdo entre Movimientos Sociales (sector que levantó a Dorador), la Coordinadora Plurinacional y Popular (que levantó a Eric Chinga), Pueblo Constituyente (ex LdP) y el FA para llevar a Maria Elisa Quinteros a la presidencia y a Amaya Álvez de RD (FA) para la vicepresidencia ejecutiva. Hasta ahora Álvez fue coordinadora de la Comisión de Reglamento y jugó un rol clave para ratificar los dos tercios. |