Los locales de comida rápida, supermercados, servicios de atención al cliente y aplicaciones de envíos no dejaron de funcionar durante toda la pandemia. Mientras los contagios suben, los empresarios nos quieren hacer ir a laburar por más que tengamos síntomas de covid-19. Nos hacen volver a trabajar antes de que se cumplan los días de aislamiento. Lo que nadie te cuenta, ahora lo vas a poder leer en la realidad de los precarios que mantenemos funcionando esas empresas.
Las nuevas disposiciones del Gobierno ante la tercera ola que estamos atravesando, anunciadas la semana pasada por la ministra de salud donde reduce el tiempo de aislamiento y básicamente hace una invitación a solo aislarse y no testearse, está claramente pensada para que las patronales se beneficien haciendo que los trabajadores vuelvan a sus puestos mucho antes.
En mi caso, hace tres días comencé con síntomas de covid-19. Ayer fui a testearme, y el resultado como más de la mitad de los hisopados en este momento en Argentina me dio positivo. Desde mi puesto de trabajo y desde la clínica que depende del sindicato de pasteleros -pues soy una trabajadora de Burger King-, me dijeron que pasado mañana debía reintegrarme al laburo “extremando los cuidados”. Hoy, a un día de tener que volver a trabajar, sigo con fiebre y tos.
En estas condiciones debo volver al trabajo, donde son de público conocimiento los ritmos en los que nos hacen laburar, corriendo de un lado hacia otro por un salario por debajo de la canasta familiar. Mientras tanto, la empresa sigue incrementado sus ganancias y escatimando en personal para hacernos producir el doble a los laburantes que ya estamos. Ni hablar de que, por haber faltado a trabajar por síntomas de covid-19, me quitaron el presentismo, que es una miseria, pero dinero necesario cuando el sueldo no alcanza para nada.
A su vez, muchxs de nosotrxs no tenemos forma de poder aislarnos o de no contagiar a nuestras familias ya que vivimos en lugares pequeños con varios familiares o amigos, porque el sueldo no alcanza para bancar un alquiler y poder comer.
El Gobierno está claro de qué lado de la mecha se encuentra. En todo este tiempo no tomó ni una sola medida ni exigencia a las empresas para que las condiciones de seguridad e higiene se garanticen. Eso sabiendo que la mayor cantidad de los contagios son producidos en nuestros lugares de trabajo o en el transporte público, donde seguimos viajando de forma hacinada. Es claro que les importan más las ganancias de los capitalistas que nuestras vidas.
En esta situación se encuentran miles de pibes y pibas, no sólo de comidas rápidas sino que también hay ejemplos de trabajadorxs de call centers. Pero se organizan: hace unos días en varios call llevaron a cabo un paro colgando las vinchas porque las patronales los hacen ir a trabajar con síntomas, no solo exponiendo a los demás trabajadores sino también la propia vida de los infectados.
En ese sentido veo la importancia de que todxs lxs laburantes precarizadxs podamos organizarnos y pelear por nuestras condiciones laborales. Yo me organizo hace un tiempo en la Red de Precarizadxs, de la que somos parte pibes y pibas de distintas ramas laborales de la juventud que hoy está precarizada. Hay compañeros y compañeras de call centers, gastronómicos, changarines, aplicaciones, comercio y desocupados, que hace un tiempo venimos peleando junto a los diputados del FIT (Nicolás del Caño, Myriam Bregman, Alejandro Vilca) por trabajos genuinos con derechos para toda la juventud, peleando por la reducción de la jornada laboral a 6 horas y cinco días de la semana, cobrando igual a la canasta familiar, para que trabajemos menos y podamos trabajar todes.
Estas nuevas disposiciones son un atropello más a la clase trabajadora en beneficio de las empresas, pero se metieron con la generación equivocada. Nosotrxs, lxs pibxs, nos cansamos de estos laburos que nos precarizan la vida, que nos destruyen el cuerpo y nos atacan la salud como en este momento a mí y a miles de pibes más.
Esa bronca queremos expresarla en demandas concretas, tanto a los sindicatos con burocracias atornilladas a los sillones que no nos defienden, como a los gobiernos que no toman ni una sola medida a favor de nosotros. Queremos trabajos con derechos donde se respeten las licencias por enfermedad (sea por covid-19 u otra), sin que nos descuenten un peso del sueldo. También exigimos una jornada laboral con menos carga horaria y un sueldo acorde a la canasta familiar, que nos permita llegar a fin de mes.
Sabemos que no es una pelea fácil. Por eso tenemos que ser cada vez más peleando en las calles y en nuestros lugares de laburo por estas consignas, comentarles a nuestros conocidxs, amigxs y compañerxs de laburos sobre esta pelea que estamos dando con los pibes y pibas de la red.
Sigamos el ejemplo de lxs trabajadores de call centers que hicieron paro en diferentes call centers del país y ayer se juntaron en una asamblea de la Red para discutir cómo seguir. Ahí participaron por ejemplo trabajadores de HeyLatam, un excallcenter de Latam que actualmente es una cooperativa de trabajo.
Hagamos una gran asamblea para discutir cómo poner en pie comisiones de seguridad e higiene para que se respeten los protocolos y prevenir los contagios. Los propios laburantes tenemos que poder controlar que la patronal no haga volver antes de tiempo a nuestros compañerxs. Tenemos que exigir a los sindicatos y al Gobierno que garanticen las condiciones laborales y que no se toque un peso de nuestro sueldo exigiendo licencias por covid pagas al igual que licencias post covid para no tener que ir a trabajar enfermos.
Deja tu denuncia acá o contactate con nosotros para ser parte de impulsar una gran asamblea de trabajadorxs precarizadxs de la red que pelee por trabajo con derechos!
Escribinos al 1123409864 | 
