Pasadas las 11:30 de este viernes, les jueces María Laura Toledo Zamora, Raúl López y Héctor Fayos, integrantes de la Sala II del Tribunal de Juicio de Orán dieron a conocer el veredicto del juicio en el que el exobispo de esa ciudad salteña, Gustavo Zanchetta, fue acusado del delito de abuso sexual agravado por su condición de ministro de culto religioso, en perjuicio de dos seminaristas.
El Tribunal decidió aplicar la pena que había solicitado la fiscal Penal de Violencia de Género, Soledad Filtrin Cuezzo, de cuatro años y seis meses de prisión. Les jueces fallaron que sea una prisión de cumplimiento efectivo y por ello ordenaron la inmediata detención del exobispo.
Como muestra el video de El Tribuno de abajo, finalizada la lectura de la sentencia hubo expresiones de descontento e indignación de parte de varias personas que aguardaban afuera de los tribunales oranenses, frente a lo que entienden fue una condena “muy baja” (aunque fue del máximo posible para los delitos de los que se lo acusó) que “no se condice” con la gravedad de los hechos probados de los que Zanchetta fue responsable.
Más de una de esas personas conocen muy bien el encubrimiento directo y explícito de Jorge Mario Bergoglio, el papa Francisco, para con Gustavo Zanchetta a lo largo de los últimos años. Un encubrimiento que llegó hasta el mismo juicio, al que envió a abogados vaticanos como "asesores" de Zanchetta.
Por eso adjudican la baja pena, comparativamente con otros casos de curas y por hechos similares, a la estrecha relación entre el sumo pontífice y el exobispo de Orán. Razones no les faltan, claramente.
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