Foto tomada del fb de Eka Ríos.
Desde que se dio a conocer el asesinato de Rubén Espinosa Becerril, fotoperiodista veracruzano autoexiliado en el Distrito Federal, el gremio periodístico y defensores de derechos humanos denunciamos al gobernador Javier Duarte como principal responsable. El gobernador de Veracruz amenazó a los periodistas unas semanas antes, a Rubén Espinosa lo trató de comprar con dinero y, al no lograrlo comenzó el acoso y las amenazas, en Xalapa. Esto provocó su autoexilio al Distrito Federal.
Además, sobre el gobierno de Javier Duarte pesan otras agresiones que han sufrido estudiantes de la Universidad Veracruzana, como la acontecida el pasado 5 de junio. Así como levantones, desapariciones y asesinatos en contra de integrantes del movimiento magisterial, estudiantes y activistas.
La PGR y PGJDF protegen a los asesinos intelectuales
De nueva cuenta, las instituciones de procuración de justicia han actuado en complicidad con el poder para proteger a los verdaderos responsables. La Procuraduría General de la República (PGR) encabezada por Arely Gómez se negó a atraer el caso, pese a tratarse de un gravísimo ataque contra un periodista y otras mujeres activistas. Los mecanismos establecidos en la Ley para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas es algo que a la justicia no le importa en absoluto.
Por su parte, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), cuyo titular es Rodolfo Fernando Ríos Garza, presentó una historia a todas luces armada. Se identificó a Daniel Pacheco Gutiérrez como presunto responsable: a esta persona con antecedentes penales se le detuvo porque “encontraron una huella” de él en el departamento, rápidamente fue ubicado y confesó, según se ha denunciado, a base de tortura su participación en los hechos, así como la de sus supuestos cómplices. Con una historia falsa y un posible chivo expiatorio, la PGJDF pretende obviar el acoso político que sufría Nadia Vera y Rubén Espinosa por parte del gobernador Javier Duarte.
La PGJDF no está buscando a los responsables para presentarlos ante la justicia, sino que busca criminalizar a las víctimas y dar un carpetazo que no afecte a las ya desprestigiadas instituciones. A los ahora difuntos las ha tratado de relacionar con bandas de asaltantes a casa habitación, tráfico de drogas, o culpabilizarlos por el hecho mismo de haber convivido en una reunión. Una práctica deleznable de la PGJ que atenta contra los derechos más básicos de las amplias mayorías.
En una misiva publicada este jueves, organizaciones de Derechos Humanos (DDHH) como Artículo 19, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de Derechos Humanos, entre otras, denunciaron el papel que está jugando la autoridad en medios de comunicación para desacreditar, discriminar y estigmatizar a las víctimas.
Los grandes medios de comunicación han mostrado una vez más su complicidad con el gobierno, pues tanto Televisa, TV Azteca y MVS se han sumado a la campaña por ocultar la responsabilidad del gobierno de Veracruz y el ataque sistemático a los periodistas críticos. De ésta forma pretenden imponer una nueva “verdad histórica” que encubra el carácter asesino del régimen.
Caso Narvarte: secuela de la impunidad en Ayotzinapa
Estas prácticas de las autoridades mexicanas son parte de la colusión del poder político con el crimen organizado, y la impunidad con la que operan. El caso ícono de esto es la desaparición y el asesinato de los normalistas de Ayotzinapa: a casi un año de la noche de Iguala no se ha hecho justicia y no se ha investigado a los responsables políticos.
Los asesinos actuaron con saña, misoginia y total barbarie. Este tipo de crímenes, en el que las mujeres son violadas, hay tortura y se ejecuta el tiro de gracia, sólo se ve cuando se quiere dejar un claro mensaje intimidatorio. Son las mismas técnicas de la Guerra Sucia, en la que el gobierno actuó contra miles de activistas durante los años 70´s, utilizando sicarios entrenados para tales fines, con la importante participación del gobierno de Estados Unidos.
En la Cámara de Diputados el Partido Revolucionario Institucional (PRI) bloqueó la exigencia de que compareciera el gobernador Javier Duarte por este y otros crímenes. De esta manera el régimen político trata de cerrar filas para garantizar la impunidad.
El periodismo independiente no se calla, ¡Salimos a las calles!
Ante el asesinato de Yesenia Quiroz, Nadia Vera, Mile Virginia Martin, Alejandra Negrete, y Rubén Espinosa, los periodistas independientes no nos callamos sino que salimos a las calles a denunciar a Javier Duarte y al gobierno federal, responsables de planear y ejecutar este ataque y de cubrirse las espaldas con el aval y la complicidad de las instituciones de justicia.
Este martes se realizó una protesta en la explanada municipal de Ecatepec, Estado de México, en la que periodistas y activistas denunciarón a Duarte y la situación que viven quienes alzan la voz en contra del gobierno. En Argentina, durante el encuentro entre River Plate y Tigres, fotoperiodistas de aquel país exigieron el “Alto a la masacre que se vive en México”.
En la capital de Aguascalientes, durante el Seminario Nacional para Autoridades Electas, integrantes del gremio periodístico exigieron a funcionarios públicos que los verdaderos autores materiales e intelectuales sean presentados ante la justicia. En Veracruz periodistas de diversos medios intervinieron en el Congreso del Estado, denunciando que “no le creen al gobierno y su versión”, además de exigir medidas de seguridad para los comunicadores.
En el Distrito Federal se llevó a cabo otra acción de protesta en la representación del Estado de Veracruz en la capital, en donde se señaló al gobierno como el responsable de este crimen y se exigió justicia para las mujeres asesinadas y para Rubén.
Desde La Izquierda Diario México – que es parte de una red de periódicos digitales socialistas e internacionalistas de América Latina y Europa- nos sumamos al rotundo grito nacional e internacional que exige justicia para Rubén, Nadia y todas las víctimas. Asumimos el reto del trabajo periodístico en México para denunciar todos los atropellos que se comenten desde el poder político y los partidos de la patronal contra los sectores populares y los más desfavorecidos, para denunciar las alianzas del gobierno con el crimen organizado y la entrega del país.
Llamamos a conformar un gran movimiento nacional e internacional combativo y en las calles, porque sólo así se puede presionar al gobierno y evitar que concreten su intento de que este y otros crímenes queden en la impunidad. Solamente una comisión investigadora independiente podrá arrancarle la verdad al Estado, para lograr el juicio y castigo de todos los responsables políticos y materiales.
La Izquierda Diario México se suma al grito internacional que clama: ¡Justicia para Rubén, Yesenia, Nadia, Mile y Alejandra! ¡Justicia para todos los periodistas y activistas asesinados por el Estado! | 
