Después de la histórica huelga de tres días de la comunidad educativa en defensa de la educación pública y de calidad de hace dos semanas, mañana las calles volverán a ser escenario de movilización.
Además estas próximas 48h de huelga tienen un nuevo punto de denuncia. La imposición del 25% del castellano a las aulas que el Gobierno ha permitido. Otro golpe a la cultura catalana y al sistema de inmersión lingüística permitido por ERC y por JxCat.
Desde el Departament y desde los medios han querido hacer ver que la huelga es solo por el adelanto del calendario escolar; pero estas jornadas tienen un malestar mucho más profundo, de años atrás, que tiene que ver con los recortes en educación y la privatización de nuestro servicio públicos.
Las ratios son imposibles, la sobrecarga por carencia de personal, carencia de infraestructuras para dar clase, fraude de ley en cuanto a los interinos, y contratos precarios para quienes hace sustituciones, son solo algunos de los puntos que hacen que digamos "basta".
Una situación muy parecida en algunos puntos a la que tenemos en el lleure educativo: contratos de 7 horas semanales, sueldos de 400€ para las monitoras, contratos temporales, ratios altísimas, y sobre todo, externalización.
Es curioso darse cuenta que quién solicitó el adelanto del calendario escolar fue la Fundación Bofill, fundación privada vinculada justamente a las empresas del lleure que hacen negocio con un servicio que tendría que ser totalmente público.
Nosotras también somos personal educativo, aunque la Generalitat no nos reconozca como tal. Porque cada día las escuelas, los comedores, las extraescolares, las acogidas y los refuerzos funcionan gracias a nosotras.
Por eso, estos días daremos todo nuestro apoyo a nuestras compañeras docentes, luchando por una educación pública, contra la privatización de la educación y contra la externalización de todos los sectores que trabajen en la educación, como es el nuestro. | 
