La medida fue anunciada por el presidente Alberto Fernández en su cuenta oficial de Twitter y responde a la grave situación que atraviesan jubilados y pensionados, principales afectados por la aceleración de los precios de la canasta básica alimentaria.
Será otorgado por única vez y no formará parte del haber, como en anteriores versiones. No es la primera vez que el gobierno busca "recomponer" los ingresos de las jubilaciones mediante bonos extraordinarios: se otorgaron dos bonos de $5.000 en diciembre de 2019 y enero de 2020 para las jubilaciones mínimas, y otro de $3.000 en abril de ese año para los haberes más bajos; mientras que en abril y mayo de 2021 se dieron bonos de $1.500 para jubilaciones de hasta $30.856, que entonces alcanzaba a 1,5 jubilaciones mínimas. En agosto de 2021 Anses dio un bono de $5.000 y, finalmente, en diciembre de 2021, los jubilados que cobraban hasta dos jubilaciones mínimas ($37.062) percibieron hasta $8.000.
Si con la reforma previsional de 2017 impulsada por Macri se consumó un "zarpazo" al modificar la fórmula de ajuste de los haberes que se "robó" un trimestre con el empalme de fórmulas, en el año 2020 ya bajo el gobierno de Alberto Fernández se congeló directamente la movilidad previsional y se otorgaron aumentos por decreto, inferiores a los que correspondían previamente.
Desde fines de 2020, con una nueva modificación de la fórmula previsional, los ajustes en las jubilaciones son trimestrales en base a la combinación en partes iguales de la evolución de la recaudación previsional y de los salarios establecida en la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte), de acuerdo a la ley de Movilidad Jubilatoria. Este cambio permitió hacerse con unos $ 160.000 millones al fisco en 2021 a costa de las jubiladas y jubilados.
De acuerdo a la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), el ajuste en el sistema previsional es indudable: el gasto en las jubilaciones y pensiones durante 2021 ($3.529.127 millones) estuvo por detrás del ritmo inflacionario y cayó 4,3% en términos reales respecto al año anterior.
Recordemos que el pasado 10 de febrero, a partir de un aumento para jubilaciones, pensiones y asignaciones familiares y universales del 12,28% para el trimestre que va de marzo a mayo, el haber mínimo para jubilados quedó fijado en $32.630.
Con el bono anunciado, una jubilada o un jubilado que cobra el haber mínimo, percibirá en abril una suma cercana a los $ 40.000. Esto es menos de la mitad de la Canasta del Jubilado que calcula la Defensoría de la Tercera Edad de CABA, que en octubre de 2021 se valuaba en $ 75.505 y que actualmente ronda los $ 90.000, teniendo en cuenta que desde ese entonces la inflación se disparó y acumula un 20 %.
De las más de 6,6 millones de jubilaciones y pensiones que están bajo la órbita de Anses, casi el 90 % están por debajo del costo de la Canasta del Jubilado. Mientras que de los 5,5 millones de titulares de jubilaciones y/o pensiones, el 83 % cobra haberes totales por debajo de la referida Canasta.
La medida no es más que un paliativo para cubrir las necesidades de vida de dos días al mes, mientras en los últimos años los jubilados han sido la variable de ajuste para cumplir con las metas de ajuste que exige el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el capital financiero para hacer frente a los vencimientos de deuda pública. |