La ofensiva del gobierno nacional contra las protestas de los movimientos sociales, con el ministro de Desarrollo Social Juan Zabaleta a la cabeza, implicó un giro a la derecha claro en su discurso.
Las declaraciones del ministro a las que se sumaron dirigentes afines al gobierno, y surgidos de organizaciones sociales, como el Chino Navarro y Emilio Pérsico fueron música para los oídos de la oposición de derecha de Juntos por el Cambio y otros fachos como Milei y cía., que aprovecharon para aportar lo suyo.
El radical Gerardo Morales, llegó al punto de encarcelar a integrantes de esas movilizaciones.
Estigmatizan a los que luchan porque buscan criminalizar la protesta, es decir transformar en delito un reclamo, ya sea para buscar la condena en la llamada "opinión pública" o para justificar posteriores represiones.
La idea que quieren instalar es que existe un repudio generalizado a las medidas de lucha de estas organizaciones. Pero, ¿es así? Salimos a la calle a averiguarlo. | 
