La indignación que generó el caso de Debanhi se mostró en las calles de la Ciudad de México convocadas por agrupaciones de mujeres: más de 3 mil personas salieron a protestar desde el Monumento a la Revolución al a Fiscalía General de Justicia.
La indignación se expresó en varios puntos del país: en Hidalgo, Oaxaca, Chihuahua, Durango, Guadalajara, Queretaro, Zacatecas y en especial en Nuevo León, el epicentro del dolor por el caso de Debanhi.
El país está de luto: en redes sociales se ha llamado a México “la fosa clandestina con himno nacional”. Durante semanas el país se mantuvo a la espectativa por la presentación con vida de Debanhi Escobar: la última ocasión que se le vio con vida fue esperando en la autopista por la noche en Nuevo León.
Debanhi tenía 18 años; desde el 9 de abril miles de personas vivimos con en vilo compartiendo su imagen para localizarla con vida. Su nombre significa “Dios bendiga a nuestra hija” en hebreo.
Los familiares de Debanhi no creen la versión de la Fiscalía de Nuevo León. Tan sólo el día de la protesta, domingo, el gobernador Samuel García admitió que fue “la primera ocasión que mira la carpeta de investigación” y el padre de Debanhi señaló que “no cree en la justicia en México”.
Ante estos casos de violencia feminicida, es urgente el impulso de un poderoso movimiento de mujeres, amplio, democrático, combativo, en las calles, que agrupe a trabajadoras y trabajadores para enfrentar la violencia contra las mujeres: si nos tocan a una, nos organizamos miles. |