Ernesto Zippo
| Trabajador de Correo Argentino | MAC Rio Gallegos - Sta Cruz
El Chaltén es una localidad, muy pujante de Santa Cruz. Es La Capital Nacional del Trekking y cada temporada llegan miles de turistas de todo el mundo, a recorrer sus bellos paisajes. Pero la otra cara (menos conocida), es los bajos salarios de quienes trabajan allí y la falta de terrenos para construir una vivienda. Pocos días atrás comenzó una ocupación de terrenos ante la falta de soluciones.
El 23 de abril pasado, varias familias decidieron ocupar una cancha de futbol. Instalaron carpas, dividieron en lotes y esperan soluciones de las autoridades municipales o provinciales. La carestía de la vida, la falta de ofertas de alquileres y los elevados precios, no se pueden pagar con salarios de 50 o 60 mil pesos.
Durante el verano último y luego de dos años de pandemia, hubo record de turistas visitando El Chaltén. En general, es un turismo que llega de Europa, América del Norte, de Asia o de otras partes de América Latina y los precios para hospedarse y su gastronomía no son accesibles. Se puede resumir, en que es una localidad mundialmente reconocida.
Pero la otra realidad, es la de sus pobladores y la falta de viviendas para que puedan vivir de manera permanente. Hay que agregar que la gran mayoría no supera los 100 mil pesos de salario y apenas pueden pagar un alquiler (cuando tienen suerte de conseguirlo). Desde hace varios años, existe la demanda de tierras donde construir una vivienda, pero prevalece el negocio inmobiliario, para favorece los emprendimientos turísticos.
La Izquierda Diario, entrevistó a Roxana Beroiz, quien es docente, es parte de una asamblea de vecinos y vive en El Chaltén. Describe la situación de gran parte de sus habitantes.
¿Cuál es la realidad de quienes viven en El Chaltén?
En Chaltén, hace más de diez años que hay personas que están solicitando terrenos. Es un pueblo muy pequeño, de unos 1800 a 2500 habitantes. Tuvo un crecimiento que no se vio reflejado, en la posibilidad de acceder a una vivienda. En el 2019 había una cien casas móviles y otras cientos de casillas.
Lo que hacemos, es construir casa sobre rieles en el patio a algún amigo que nos presta un espacio en su vivienda, para luego moverla en algún momento, cuando accedamos a un terreno. A veces hay cuatro construcciones en un solo terreno y así es la situación de las tres cuartas partes de la población. Es un lugar con mucha explotación turística y mucha necesidad de mano de obra, pero la gente no puede conseguir donde vivir y no tener que mudarse tres o cuatro veces al año. Además, los valores de los alquileres están al precio de la actividad turística, que no es la realidad o la posibilidad de un trabajador de base.
¿Cuál es el motivo por el que no se entregan terrenos?
Ya desde los inicios del pueblo, en 1985 se decía que no había terrenos y los pocos que se entregaron, siempre fue con la misma respuesta. La distribución de tierras hoy deja en evidencia que, gran parte corresponde a instituciones y comercios, la que corresponde a viviendas es un mínima parte del todo. Quedan unos pocos terrenos dentro del ejido, pero el municipio (que tiene una existencia de hace seis años), siempre tiene una excusa para dilatar la entrega y la necesidad de ampliar hacia los terrenos fiscales o una negociación con Parques Nacionales o una expropiación. En los alrededores hay posibilidades para adquirir terrenos. Hay gente con estancias, que están en condiciones de negociar terrenos para urbanizar.
Quienes estamos pidiendo un terreno, se calcula que somos entre trecientos y cuatrocientas personas. No tenemos un cálculo exacto, pero como es un pueblo chico, calculamos esa cantidad en la asamblea. Si nos dieran esa cantidad de terrenos, clamaría la situación.
¿Entonces se prioriza más el negocio turístico, a la prioridad que tengan una vivienda para los trabajadores?
Creo que tienen que ver con una problemática, que no sólo tiene que ver con El Chaltén. La tierra como propiedad privada, en vez de ser algo fundamental para la vida, se está destinando para los negocios turísticos, productivos y para las grandes empresas. Con solo pensar que hubo gente que vino a trabajar y se tuvo que ir, porque no tenía donde vivir. Además los costos no tienen relación con los sueldos de los que vivimos aquí.
¿Cuál es el sueldo promedio de quienes trabajan en el turismo, en el municipio o la docencia?
Hay sueldos de trabajadores municipales que están, entre cincuenta y sesenta mil pesos. En el turismo, están en sesenta mil pesos, algunos llegaron a ochenta mil pesos y son los menos quienes llegan a cien o ciento diez mil pesos. En la docencia, estamos ochenta mil con un cargo. Aparte de la inflación y lo caro de un alquiler, tampoco se consigue.
¿En que lugar, están ocupando las familias que reclaman terrenos?
Es una ocupación de protesta, en una cancha de futbol que es de un club. Son unas diez familias que se organizaron de manera impecable y diagramaron una especie de lotes iguales a los tamaños de los lotes que están en el barrio vecino. Armaron unas letrinas de baños secos. Están allí tranquilos, porque no se puede vivir de manera hacinada con hijo y en condiciones muy precarias. Hay mucha gente que aunque no están ocupando terrenos, vivimos de la misma manera y no sabemos cuál es la solución del municipio o del gobierno provincial, porque hasta ahora no dijeron nada. Hay silencio absoluto de las autoridades y tampoco se acercaron a hablar con la gente.