1. Las cuentas no salen, para eso tendría que haber ahorrado el 90% de su sueldo. En cualquier caso, es una cantidad obscena de dinero, con el salario mínimo y ahorrando la mitad (lo cual es improbable) tardaríamos 416 años en ahorrarlo. Pero por si no tenía suficiente el gobierno le sube un 2% el sueldo.
2. Probablemente sea bastante más lo que acumulan, de hecho, ya salía Felipe VI como beneficiario de una offshore, el problema es que es imposible comprobarlo, porque a pesar de esta operación de propaganda de su supuesta transparencia, es inexpugnable y, además, inviolable.
3. Por cierto, ¿y los 2 mil millones del padre? Parece que su ingente fortuna y sus infinitos casos de corrupción más que manifiestos quedan fuera de esta operación. Como si Felipe VI no tuviera nada que ver con el emérito.
4. Todo esto viene envuelto por un decreto que el PSOE ha cocinado en secreto con el PP (en el tiempo libre que le dejan los casos de espionaje a los independentistas catalanes, el rearme imperialista y demás). Un decreto para reforzar “la ejemplaridad en la Casa Real, en línea con los principios que han presidido desde su inicio el reinado de SM Felipe VI". Hay que reírse.
5. UP denuncia que se ha hecho sin su conocimiento y que ni siquiera se ha informado a todos los partidos (porque el PSOE dijo que a los que no son “constitucionalistas”). Pero de poco sirven los aspavientos de los socios de gobierno del PSOE mientras siguen ahí, legitimando sus medidas y blanqueando la monarquía, como lo han hecho durante toda la legislatura con aplausos y reivindicaciones varias. Más increíble aún es lo de los ministros “republicanos” del PC, Yolanda Diaz y Alberto Garzón, que guardan silencio. Hay que ser lacayos.
6. A las monarquías históricamente se la ha echado con la lucha, por la fuerza. No negociando con las instituciones del régimen echo a su medida.
A pocos días del 1 de mayo, día internacional de lucha de la clase obrera, recordemos dónde está la fuerza para terminar con esta monarquía reaccionaria y transformarlo todo: en la clase trabajadora, las mujeres y la juventud combativa. Ya es hora de que impongan un referéndum. Porque queremos decidirlo todo.
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