Al menos tres personas resultaron heridas este domingo en Santiago, Chile, por disparos efectuados por dos individuos contra participantes de la marcha convocada por la Central Clasista de Trabajadores.
Los heridos son un hombre y dos mujeres. Una de ellas, periodista de la televisora comunitaria Señal 3 La Victoria identificada como Francisca Sandoval, continua grave tras recibir un balazo en la cabeza.
Según informó el jefe de la Zona Metropolitana de Carabineros, general Enrique Monrás, los presuntos atacantes fueron detenidos y puestos a disposición de la justicia. Convenientemente el general Monrás no comentó acerca de las imágenes que publicaron diversos medios alternativos y que vinculan a los atacantes con los propios Carabineros.
Ante la evidencia irrefutable del accionar de Carabineros, el gobierno solo anunció una “investigación interna” y los acusados fueron puestos en prisión domiciliaria, un trato privilegiado que no recibieron cientos de detenidos durante la rebelión popular o los jóvenes de los barrios más plebeyos.
Según informó la agencia EFE, Gabriel Boric calificó de “absolutamente inaceptable” esta situación, como si no fuera la máxima autoridad del país, ni tuviera responsabilidad sobre el accionar “inaceptable” de la infame policía militarizada.
Referentes de derecho humanos y de agrupaciones de izquierda salieron a cruzar al presidente, exigiendo que se haga responsable. La familia de Sandoval repudió el actuar del gobierno. En el caso del Colegio de Periodistas Metropolitano, exigieron la salida del General Director de Carabineros Ricardo Yañez por su responsabilidad en el actuar policial.
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