Este lunes, en Parque Norte (CABA) Alberto Fernández soltó otra de sus frases hechas: “Así como me ocupé, me ocupo y me voy a seguir ocupando de que el trabajo crezca en la Argentina, voy a trabajar incansablemente para que el bolsillo de los argentinos sea cada día más fuerte, para que cada vez haya más dinero en el bolsillo de los que trabajan”.
El presidente habla como si la inflación no carcomiera los salarios de la inmensa mayoría de la clase obrera cada día. Como si este mismo lunes no se hubieran anunciando aumentos en las naftas. Como si el índice de inflación pronosticado para abril -que se anunciará este jueves- no se anunciara ya como bastante alto. Tan alto o casi tan alto como el correspondiente a marzo, que se ubicó en 6.7 %.
El presidente habló durante el 57° Congreso de la Federación de Asociaciones Trabajadores de la Sanidad Argentina, la FATSA, que encabeza el histórico Carlos West Ocampo, un dirigente que lleva décadas al frente de los sillones sindicales.
Acompañando y a los abrazos estuvo Héctor Daer, titular del gremio de Sanidad y uno de los jefes de la CGT. El dirigente viene de protagonizar un malabarismo en las palabras, afirmando que hay “preocupación por la escalada inflacionaria" pero "no hay motivos para marchar".
Daer es uno de los responsables de la caída salarial que golpea al conjunto de la clase obrera en los últimos años durante los años de Macri y los del Gobierno del Frente de Todos. Está al frente de la CGT desde el 25 de agosto de 2016. En estos casi seis años no hubo planes de lucha a la altura de enfrentar el ataque al salario que desataron las empresas.
Entre los responsables de que haya cada vez menos dinero en el bolsillo de la clase trabajadora están Daer y el conjunto de los dirigentes sindicales burocráticos. La enorme mayoría de ellos, por no decir todos, están integrados en la coalición gobernante.
Las tensiones internas y las divisiones que cruzan al Frente de Todos también se expresan al interior de la burocracia sindical. Los alineamientos políticos junto a Alberto Fernández y Cristina Kirchner son parte de esos movimientos. En el caso de Daer claramente se alinea con el presidente.
Al margen, hay que señalar que Alberto Fernández -y el conjunto del Frente de Todos- estuvieron lejos de “garantizar el salario” en estos años. Por el contrario, las grandes patronales ganaron millones durante la pandemia, mientras la clase trabajadora perdió de conjunto.
|