"Existen viviendas que quedaron pendientes pero no se preocupen porque vamos a ir atendiéndolas una por una; van a ser todas las viviendas censadas como corresponde", declaró el titular del INDEC ante la ola de reclamos en redes sociales y de oyentes en programas de radio.
Según proyecciones, se estima que la población del país asciende a 47 millones de personas. Más de la mitad habría completado el censo en internet; sin embargo, los más de 600 mil censistas no alcanzaron para cubrir las encuestas al resto de la población en las visitas a las viviendas.
Hasta el martes 24 de mayo se extenderá la etapa de supervisión, para contemplar a quienes no hayan sido censados en base al registro de las viviendas que no fueron visitadas. Quienes no recibieron la visita de la persona censista durante la jornada de ayer y tampoco completaron el Censo digital pueden enviar un correo a [email protected] o comunicarse al 0800-345-2022 para denunciar la situación e informar nombre, provincia, partido, localidad, dirección de la vivienda, correo electrónico y un teléfono de contacto. A la par se rehabilitó la posibilidad de completar el formulario digital (exclusivamente para quienes no lo habían hecho antes).
Aunque hoy se podrán presentar proyecciones de datos globales, el INDEC prevé que en tres meses podrá informar las tasas de sexo, edad y población por regiones y, en ocho meses, se comunicarán los primeros datos definitivos.
El operativo costó casi 13 mil millones de pesos, para el despliegue de 600 mil personas, mayoritariamente estudiantes universitarios y docentes, que con una capacitación denunciada como deficiente y una remuneración de 6 mil pesos, recorrieron desde los grandes centros urbanos hasta los más recónditos parajes inhóspitos del territorio nacional con 37 millones de cuestionarios impresos.
En los centros urbanos, estaba previsto que cada censista recorriera 36 viviendas y 18 unidades habitacionales en las zonas de más difícil acceso. En los días previos, se relevó a las personas de las unidades que se designan con el eufemismo de "viviendas colectivas", lo que incluye desde geriátricos, hoteles residenciales, paradores, centros religiosos y hospitales hasta las cárceles. También se censó a las personas en situación de calle: una situación que, cada vez más familias jóvenes y personas solas atraviesan al calor de la crisis que se profundiza. |