Durante la reunión de este jueves en Casa Rosada, en la que participaron la mayorías de los ministros y Marco Lavagna del Indec como invitado especial, el jefe de gabinete, Juan Manzur incitó a los ministros a que participaran en su totalidad del acto que realizará este viernes Gerardo Martinez, titular de la UOCRA (y ex personal de inteligencia durante la última dictadura), en apoyo al presidente en Esteban Echeverría.
Además de ese “pedido” particular, a poco más de una semana de que el presidente advirtiera que “quien no acompañe no puede seguir”, el derechista gobernador de Tucumán en uso de licencia, sugirió a los ministros que salieran más en los medios y redes sociales a mostrar “gestión”. De esa manera desde el entorno del presidente intentan contrarrestar el fuerte peso que tiene la interna de la coalición en la agenda de los medios.
Según fuentes de Casa Rosada citadas por el diario La Nación, la exhortación de la presencia en el acto, en los medios y las redes para los ministros es en busca de dar una imagen que resalte más la "gestión" y la "unidad" en el marco de reducir el peso que actualmente tienen las peleas internas con el ala cristinista. En ese sentido, el jefe de gabinete les habría pedido a los titulares de las distintas carteras que fueran “más activos”.
Habrá que ver qué resultado real terminan teniendo éstos objetivos en una interna que no da señales de agotamiento. Vale tener en cuenta que tan sólo una semana atrás, el presidente señalaba que “definitivamente” estaba para pelear por la reelección, o que Máximo pocos días después le haya “aconsejado” a Fernández “obedecer” si quería conducir.
Sin ir más lejos, poco antes de la reunión Aníbal Fernández, fiel a su estilo al servicio de quien lo mande, lanzó una declaración picante contra Cristina: "Se corrió de la gestión.. Y la gestión la formamos todos y la llevamos todos con el mismo objetivo. No tiene ningún sentido que quienes llegamos con un objetivo puesto de manifiesto lo corramos para no seguir avanzando sobre este tema".
Pero además de las peleas de palacio al interior de la coalición peronista, la economía no ayuda a la "gestión" de Fernández ni a la imagen que intenta recuperar de cara al 2023. Una inflación imparable, que en abril fue del 6 %, mientras que los alimentos crecieron un 62,1 % en el último año, continúan carcomiendo los ingresos de las mayorías trabajadoras, a quienes se les había prometido que recuperarían lo perdido si ganaba el Frente de Todos. Sin ir más lejos, el gremio de la construcción, a partir del cual se buscará dar en el acto una imagen de reactivación por el rebote económico, es uno de los sectores con mayor nivel de precarización, tercerización y accidentes laborales.
Los hechos dirán cuánto logrará el albertismo avanzar en estos planes de mostrar unidad en medio de la interna y fuerte crisis que atraviesa su administración. Una interna en la que a pesar de los cruces, el sector "crítico" no saca los pies del plato y fuera de las palabras y en los hechos sigue aportando gobernabilidad, como ocurrió con la votación del acuerdo con el FMI.
En lo que respecta al acto del viernes, a pesar del pedido oficial hacia los ministros, uno de ellos, el camporista Wado de Pedro adelantó ya su ausencia por “motivos impostergables”. De Pedro, a pesar de ser el ministro de la Cámpora más cercano al presidente viene haciendo su propio juego y acercándose a actores del centro político, tanto del peronismo como de Juntos por el Cambio. Incluso existe el rumor de su posible candidatura en las próximas presidenciales. |