Más de 85 familias del barrio toba, en la zona oeste de Rosario están reclamando un lugar para vivir. Recuperaron un terreno abandonado para intentar tener un lugar donde criar a más de 300 niños y los amenazaron con desalojo.
Los testimonios del video reflejan la realidad de millones. Falta de trabajo, sueldos por el piso, alquileres altos, una inflación que golpea con fuerza y el hambre que cada vez es mayor.
Así como se vio en la toma de Magaldi de Rosario y en tantos lugares más del país, ellos demuestran que no se resignan a la miseria que hoy les toca vivir, quieren luchar por un pedazo de tierra, vivienda y trabajo, un derecho elemental que hoy no se cumple.
Se comenzaron a organizar y reclaman a los diferentes niveles del estado una instancia de diálogo para evitar el desalojo, rechazan la presencia policial y piden una solución a su demanda. Es necesario, rodear de solidaridad a estás familias que deciden luchar en una ciudad que tiene uno de los niveles más altos de desocupación y crisis habitacional. La vivienda es un derecho, reclamarlo no es delito. |