Agremiados del Sintcop bloquearon este lunes la carretera México-Texcoco para denunciar las violaciones a su Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) por parte de la autoridad de su universidad, bloqueando las laterales de la vía a la altura del Centro Cultural Bicentenario, desplegando las mantas rojinegras que en México representan la huelga.
Así, las y los trabajadores denunciaron la falta de respeto a sus demandas y a su organización, porque la institución no puede realizar actividades mientras una huelga se lleva a cabo, y bajo la dirección general de Víctor Manuel Villalobos Arámbula, las actividades se siguen realizando.
Además, señalaron que el aumento salarial ofrecido por la autoridad es magro, pues su lucha busca romper el techo salarial de 3.5% de aumento, el que fue impuesto a todos los trabajadores y trabajadoras de las universidades a nivel nacional por la dirección del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM).
El Sintcop también ha venido denunciando que la institución no resuelve las demandas de forma expedita, señalando la invasión en la materia de trabajo, años con el escalafón detenido, falta de capacitación, la unilateralidad en la contratación de personal y falta de capacidad negociadora. Situación que también se dio en 2020 cuando realizaron otra huelga que se vio interrumpida por la pandemia, de hecho, la huelga iniciada el 18 de marzo de este año, es una continuación directa del conflicto que se dio en aquel momento, donde la administración universitaria aprovechó la emergencia sanitaria para avanzar en sus medidas anti obreras, lo que ha sido una política generalizada y aplicada por el gobierno de la 4T, contando con la complicidad de los partidos neoliberales (PRI, PAN, PRD etc.), quienes, si bien era de esperarse, han guardado completo silencio ante la situación actual.
Crónica de la precarización anunciada
La huelga del 2020 inició por irregularidades en la plantilla de personal que las autoridades manejaban violentando la contratación colectiva, ya que comenzaron a contratar personal bajo el esquema de prestadores de servicios profesionales, -práctica que vemos en todas las dependencias estatales-. Por lo que el Sintcop exigió a las autoridades que respetaran la contratación colectiva y no se hicieran contrataciones sin su aprobación, ya que las mismas tenían que ser de base y no por capítulo 3000 como se estuvieron haciendo, lo que representaba una enorme y flagrante violación al CCT.
Pero ¿Qué es el capítulo 3000? Esta normatividad es otra forma de simular la relación laboral que las dependencias implementan para evitar cumplir con sus obligaciones como patronal, como dar seguridad social, prestaciones y jubilación. En términos organizativos impide la sindicalización y pone a las y los trabajadores en condiciones vulnerables para luchar por sus derechos, el cual ha sido aplicado en diversas dependencias federales. Es una forma de contratación diseñada para reproducir la precarización laboral, lo que significa que no se otorga derechos laborales a los trabajadores y se le somete a la inestabilidad laboral y expuestos al despido velado, el cual se da con el pretexto de que el contrato llegó a su término y este no es renovado cuando las autoridades discrecionalmente lo deciden así.
El Sintcop requiere salir del aislamiento
Vemos como una necesidad que, el Sindicato del Colegio de Postgraduados, busque unirse a otras luchas en curso del sector educativo ya que sus causas son las mismas, como el caso de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), o las exigencias del Sindicato Único de Trabajadores del Instituto de Educación Media Superior (SUTIEMS), así como la huelga en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), -por parte del grupo disidente del STEUABJO-, que estalló su huelga el 31 de mayo con demandas similares, como el incremento de salarios, bonos, además de prestaciones y otros temas de carácter económico, donde la autoridad tampoco ha tenido la voluntad de resolver. Lo mismo se ha presentado con el Sindicato de la Único de Trabajadores de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (SUTUACM), donde el ofrecimiento salarial de la rectoría para resolver el conflicto fue magro.
También, para enfrentar los ataques a la educación pública y la cerrazón de las autoridades, creemos fundamental que el Sintcop, pero también las demás universidades, busquen la unidad dentro de sus instituciones, entre trabajadores sindicalizados y no sindicalizados, afiliando a estos últimos para fortalecerse y frenar la aplicación del capítulo 3000. A la vez que buscan el apoyo de otros sindicatos de investigadores, universitarios y sectores precarizados que también están en lucha junto a organizaciones sociales.
Desde las bases, requerimos exigir a los grandes sindicatos, federaciones y centrales de trabajadorxs que se reclaman democráticas, que se movilicen contra la política anti obrera de la 4T y rompan la tregua con el gobierno para impedir que éste siga avanzando sobre nuestras conquistas.
Sería un enorme paso adelante para todo el sector educativo si, la Coordinadora Nacional de Sindicatos Universitarios, de Educación Superior, Investigación y Cultura (CNSUECIC), la Coordinadora Nacional de Trabajadore de la Educación (CNTE), la Nueva Central de Trabajadores (NCT) y la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), se pusieran al frente de nuestras luchas y demandas, además de tomar en sus manos las del estudiantado, unidad con la cual, podríamos hacer retroceder a las autoridades gubernamentales y universitarias y lograr el triunfo de las luchas de las comunidades universitarias y de investigación.
Ante esta situación hacemos un llamado a fortalecer la unidad con otros sectores rumbo al Encuentro de Trabajadores convocado por la Asamblea de Trabajadoras y Trabajadores en Lucha para el 25 y 26 de junio, con el fin de fomentar el intercambio, la discusión, la lucha y la movilización conjunta. |
