Este lunes, las y los trabajadores del Instituto Biológico, que llevan meses en la pelea por sus derechos laborales y en defensa de la salud pública, realizaron un nuevo abrazo simbólico a la institución. Tras mantenerse firmes en su rechazo al proyecto de Sociedad del Estado que impulsa el ministro de Salud Nicolás Kreplak, ahora el Gobierno expresó su intención de sacar determinados sectores del Instituto, profundizando el vaciamiento que anteriormente llevó adelante María Eugenia Vidal. Ante esto, las y los trabajadores decidieron redoblar la organización, difundir su pelea entre otros trabajadores y en la comunidad, y movilizar para denunciar estos ataques y exigir al Gobierno la inversión y el presupuesto que hace falta para funcionar en condiciones.
Acompañando el abrazo y la asamblea de las y los autoconvocados del Biológico estuvieron les legisladores del Frente de Izquierda Graciela Calderón (IS) y Guillermo Kane (PO); Luana Simioni, referente del FIT en la región y Secretaria Gral de la JI de ATE IOMA; representantes de CICOP; trabajadores de Astillero Río Santiago; delegados y trabajadores de diferentes dependencias estatales de la Agrupación Marrón; docentes de Suteba; familias del Polo Obrero de Tolosa y estudiantes de la UNLP de la Juventud del PTS.
El próximo miércoles realizarán una movilización a la Legislatura bonaerense, donde entregarán un documento firmado por el conjunto de las y los trabajadores con los fundamentos de rechazo a la Sociedad del Estado. Entre ellos señalan que el proyecto del gobernador Kicillof tiene como finalidad independizar al Instituto Biológico de las normas de las reparticiones estatales y poder, favoreciendo así las tercerizaciones y privatizaciones de su actividad en un amplio campo. A la vez que se avanzaría en flexibilizar las relaciones laborales, aboliendo de hecho las conquistas que significan las leyes 10430 y 10471, para los nuevos trabajadores que ingresen estableciendo una doble escala.
Para las y los trabajadores se trata de un plan que va en completo desmedro de la salud pública. "El cambio de la figura jurídica a Sociedad del Estado, cuyo fin es comercializar, pone en riesgo todas las acciones de promoción y asistencia de la salud pública, especialmente aquellas que carecen de rentabilidad y valor de mercado", sostienen. Y aseguran además que un proyecto de este tipo le generará mayores gastos a la Provincia de Buenos Aires.
A cambio, exigen al gobierno de Kicillof y Kreplak la reactivación de la institución, y que se impulse la ampliación y se concrete la aplicación del presupuesto asignado para este año. "No queremos destruir para construir, la salud pública no se negocia", expresaron las y los trabajadores. |