La legislatura porteña aprobó, con los votos del oficialismo, el proyecto de Larreta de transformar a la avenida Honorio Pueyrredón, entre Franklin y Neuquén, en una calle d convivencia, donde se pretende construir un parque lineal de cemento con canteros.
Recordemos que esta construcción la comenzó el Gobierno porteño sin implementar los mecanismos legislativos correspondientes, intentando ocultar el debate que se dio con múltiples movilizaciones de los vecinos de Caballito, tres fallos judiciales que paralizaron las obras y luego de una audiencia pública completamente amañada, llego al recinto.
La audiencia pública, dicho sea de paso simple trámite administrativo ya que no es vinculante, fue completamente amañada, como denunciaran los vecinos "el hecho de que la audiencia no pueda ser observada por cualquier ciudadano, ya sea presencialmente o por YouTube, anula el carácter público de la misma". Además la misma se realizó rodeada por la policía para que los vecinos no pueda acercarse a la misma y habiéndose realizado en horarios imposibles para cualquiera que trabaje. Tan impune y prepotente es el Gobierno porteño que intenta incluso silenciar las voces opositoras para imponer sus proyectos.
Como expresaron legisladores de la oposición y vienen reclamando los vecinos, “es falso que van a transformar Honorio Pueyrredón en un espacio verde. Nosotros si queremos un espacio verde para el barrio, pero no en detrimento de anular una avenida tan importante que colapsaría a todas las arterias de la zona. Por eso exigimos que se realice un parque público en los playones del ferrocarril”. Tan fue así la mentira del Gobierno, que lo que se aprobó este jueves fue la construcción de una “calle de convivencia” o sea un espacio de cemento con canteros, que hacen pasar como plaza, al estilo de lo que hicieran en la avenida Corrientes, como ejemplificaran varios legisladores.
Las asociaciones vecinales pretenden un verdadero espacio verde y plaza para el barrio de Caballito y por eso exigen que el mismo sea emplazado en el playón ferroviario, junto al Club Ferrocarril Oeste, sin embargo, esos terrenos son parte de un proyecto inmobiliario para que la empresa IRSA construya un shopping y nuevas y más torres, en un barrio abarrotado de edificios de altura.
Desde el Frente de Izquierda recordaron la denuncia que realizaran los vecinos, de que lo terrenos del playón ferroviario son una disputa entre la Nación y la Ciudad. Mientras ya existe una ley de rezonificaciones sobre esos predios que habilitan la construcción de torres, Wado De Pedro y Horacio Rodríguez Larreta siguen en negociaciones sobre la pertenencia de estos terrenos y es una de las preocupaciones de los vecinos de Caballito.
El proyecto del Gobierno contempla 9500 metros cuadrados de esta plaza de cemento con canteros, mientras el proyecto de los vecinos sobre el playón ferroviario le daría al barrio un parque de publico de 15 hectáreas. Este contraste tira por la borda la falsa campaña de Larreta de ofrecer una “ciudad verde” y cada espacio publico que encuentra intenta por todos los medios habilitarlos para la construcción de torres o emprendimientos inmobiliarios. Una ciudad para la “especulación en ladrillos” destruyendo la fisonomía de los barrios, complejizando el traslado en la ciudad, destruyendo el medio ambiente, encareciendo la vivienda y expulsando a los porteños trabajadores de la ciudad. El derecho a una Ciudad se encuentra vulnerado paso a paso, mientras las grandes constructoras e inmobiliarias encuentran en Larreta un digno defensor de sus intereses. | 
