Poke Hermosilla y Martin Fernández, militantes revolucionarios y trabajadores de Kraft-Mondelez Pacheco, continúan la polémica con lxs compañerxs del Partido Obrero.
En una reciente nota que publicó el Partido Obrero se ensaya una respuesta al balance del Congreso del PTS y la orientación que votamos para intervenir en esta situación. Parten de tomar de forma unilateral el artículo de Raúl Godoy donde cuenta cómo “con profundo debate y reflexión, nuestro partido fue afinando las herramientas y delineando su política para seguir interviniendo con más fuerzas como un factor actuante en la escena política nacional”.
En su lamentable artículo el compañero del PO, que es nuevo en la zona o no conoce en profundidad la experiencia de la zona norte, se hace eco, entre otras calumnias, de algo que nunca pasó. Y asevera que en el período 2009 / 2015 nunca se paró en la planta Kraft-Mondelez Pacheco por reclamos reivindicativos, e incluso que carnereamos un paro convocado por el moyanismo.
Como obreros revolucionarios del PTS, entendemos que hay que unificar los distintos sectores de nuestra clase, que está dividida por gracia de la burocracia sindical pro patronal y el peronismo. En el artículo señalamos que en el segundo cordón del gran Bs. As. se concentra gran parte de los que nos dieron su apoyo en las últimas elecciones, rompiendo muchas veces con su tradición de voto peronista, en su mayoría de sectores de la clase obrera más precarios, desocupados o de la juventud obrera, quienes tienen los peores trabajos. Día a día peleamos por organizar esa fuerza hoy dispersa, fortalecer su organización política y sindical en sus lugares de trabajo. En todos estos años hemos organizado peleas en importantes establecimientos, como el conflicto de Kraft en 2009, el de la autopartista Lear en el 2014 o la experiencia de poner bajo control obrero la gráfica Donnelley, hoy Madygraf, entre otros, todos conflictos que se dieron bajo gobiernos peronistas. O el gran conflicto de Pepsico del 2017, con Macri en el gobierno. Queremos volcar la experiencia de estas escuelas de luchas para aportar a los sectores más postergados de nuestra clase. Para nosotros es muy importante y fundamental la unidad de las filas obreras y nos oponemos a todos los que tratan con desdén a estos sectores.
La agrupación Bordó Leonardo Norniella de la alimentación hace muchos años que organiza a la oposición en el gremio.
Frente a la mentira que declara PO, vamos a enumerar solo algunas de las huelgas de la que fuimos impulsores: en el 2009 en ese entonces como miembros de la agrupación Desde Abajo, con clara influencia en el turno noche, ante los despidos de compañeros, impulsamos en común con el conjunto de los trabajadores los 38 días de paro y más de 12 cortes de la Panamericana. Luego, ya siendo Comisión Interna, lo hicimos contra el desprecio por la vida obrera del departamento médico para mejorar las condiciones de salud, e impulsamos un paro de 6 días donde se consiguió que la empresa ponga una ambulancia de alta complejidad (que al día de hoy se perdió con dirección la Verde y la Celeste y Blanca), que se remueva a la dirección del mismo departamento y que se reconozcan los certificados médicos. Ante el acoso de un líder hacia una compañera en el 2011, realizamos un paro del sector pastas donde solidariamente se impuso un apoyo masivo y la patronal tuvo que retroceder. También, realizamos paros solidarios como ante el asesinato de Mariano Ferreyra en manos de la patota de la Unión Ferroviaria con la complicidad de la Policía Bonaerense, las asambleas de Kraft-Mondelez votaron parar 2 horas por turno como muestra de repudio, junto a un corte de la Panamericana el mismo día. A la par de estas medidas, impulsamos paros frente a despidos, por adicionales, por el pase a planta de tercerizados (por ejemplo, de refrigeración). Llevamos adelante la lucha por la efectivización de los contratados. Paramos y marchamos a las convocatorias que hizo la Federación de la Alimentación, a pesar de las diferencias con estos dirigentes. Todo esto, solo para mencionar medidas de acción directa y marchas impulsadas por la Comisión Interna del PTS y compañeros independientes.
Como clasistas, batallamos para que sean las y los trabajadores en asamblea quienes democráticamente tomen en sus manos las diferentes peleas. En ocasiones nos tocó estar en minoría o que las asambleas no sean como nosotros propusimos. Por ejemplo, en un paro impulsado por Moyano, la asamblea obrera votó por una pequeña diferencia no participar. En este caso la agrupación Bordó junto a la izquierda y delegaciones de trabajadores de la zona norte participamos igualmente de los cortes de Panamericana y de los diferentes piquetes.
Como bien describimos, siendo interna o no, siempre intervenimos para que las y los trabajadores tomen en sus manos las diferentes decisiones, generando una tradición de muchísimos años en el movimiento obrero de la alimentación, que excede la fábrica de Kraft-Mondelez Pacheco.
Hoy, que no estamos en la dirección de la Interna, seguimos peleando por forjar un fracción que pelee por la unidad de las filas obreras. Son muchas las batallas que tenemos por delante. La primera es que la burocracia de Rodolfo Daer y la Comisión Interna en manos de la CCC llamen a asambleas y medidas de fuerza por la efectivización de los compañeros contratados y tercerizados que llegan a ser casi el 20% de planta. Un nuevo fraude que esta multinacional acordó implementar con el sindicato y la interna en el Ministerio de Trabajo.
Gran acto muestra fuerza y amplio apoyo por la reincorporación de Julio Tévez y contra los despidos (2019).
Peleamos por un movimiento obrero solidario con los desocupados y los sectores populares. Porque sabemos que no alcanza la lucha al interior de las fábricas, porque necesitamos una salida para el conjunto de los trabajadores. La pelea política no puede confundirse en una provocación, como lo hizo Giachello en su nota de Prensa Obrera. Aclaramos que llamar carnero a una agrupación o militante clasista no es gratis y que cada cual debe responder por sus dichos y hechos. Nosotros, contrario a esta actitud, seguimos peleando día a día al interior de la fábrica y fuera de ella. No tener brújula hace igualar clasistas con corrientes que acuerdan con Rodolfo Daer, como la Celeste y Blanca (impulsada por el maoísta PCR e independientes), a la cual el PO llamó a votar en el 2015.
Esperamos que este pequeño artículo ayude a tener presentes los hechos y a mejorar el debate que siempre es bienvenido.
