Debanhi Susana Escobar Bazaldúa había desaparecido desde el 9 de abril de este año y no fue sino hasta la noche del 21 de abril que su cuerpo fue descubierto en la cisterna del motel Nueva Casilla. Inicialmente, la Fiscalía del Estado de Nuevo León había determinado que la causa de su muerte había sido por «contusión profunda de cráneo», esto a pesar de los signos de violencia en el cuerpo de la joven.

Debanhi fue sepultada el 23 de abril, pero el pasado 30 de junio su cuerpo fue exhumado para realizarle una nueva autopsia para determinar las causas de su fallecimiento luego de que sus familiares denunciaran manipulaciones por parte de las autoridades novoleonesas. El día de hoy se dieron a conocer los resultados de dicha investigación.

El Instituto de Servicios Periciales y Ciencias Forenses del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México fue el encargado de colaborar con el dictamen, determinó, de la mano de su director, Felipe Edmundo Takeshi Medina, que Debanhi Escobar murió por asfixia por sofocación mediante obstrucción de orificios respiratorios, contradiciendo la autopsia e informes de la Fiscalía Novoleonesa. Asimismo, descartaron que la asfixia haya sido por sumerción, es decir, Debanhi no se habría ahogado en la cisterna del Nueva Casilla.

Es necesario movilizarnos por #NiUnaMenos

El caso de Debanhi nuevamente sale a corroborar dos cosas. La primera, que no podemos confiar en las autoridades. Desde el inicio, el papel de la fiscalía fue el de revictimizar a la joven. A este coro reaccionario se unieron influencers en redes sociales y medios de comunicación, los cuales reprochaban a Don Mario Escobar, padre de Debanhi, el haber "abandonado a su hija" por permitirle salir de fiesta hasta tarde.

Por otro lado, de manera hipócrita vimos a los responsables del aumento de la violencia mostrar "solidaridad" con la familia de Debanhi, como si su accionar no hubiera coadyuvado a que cientos de mujeres sufran violencia sistémica en este país. Nos referimos a gente como Marcela Guerra Castillo, diputada del PRI, cuyo partido continuó la estrategia de militarización del PAN y en el sexenio de Peña Nieto arrojó la cifra de 100 mil muertos como consecuencia de ella.

La segunda es que solamente la movilización en las calles en solidaridad con las desaparecidas podrá arrancar la verdad a las instituciones. Por ello es que desde La Izquierda Diario consideramos importante la conformación de una comisión independiente de mujeres, familiares de desaparecidas(os), organizaciones de derechos humanos y especialistas para que revise el caso de Debanhi y de muchas otras, ya que aún no sabemos qué ocurrió para que la chica perdiera la vida luego de que se le captara caminando sola en la carretera.

Salgamos a las calles por #NiUnaMenos con total independencia del gobierno de la 4T que militariza con la Guardia Nacional, así como también del Movimiento Ciudadano que administra el estado de Nuevo León y de la derecha neoliberal que inició la "narcoguerra" en 2006; debemos salir exigiendo justicia para las miles de mujeres asesinadas y desaparecidas gracias a la complicidad de un Estado que permite la existencia de redes de trata y que hace que 11 mujeres al día pierdan la vida.