Luego que Alberto Fernández, en su discurso de este viernes, donde solo se quejó contra “los que especulan con el dólar” y a los que “guardan 20 mil millones de dólares en el campo y nos los liquidan esperando mayor rentabilidad” -pero no anunció ninguna medida contra los especuladores-, los señores del campo salieron a criticar con dureza al presidente porque los “culpó” de no querer vender la cosecha, “cuando el país lo necesita”.
En el marco de la Exposición Rural de Palermo, Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), se quejó del trato del jefe de Estado. “El Presidente tiene un concepto errado sobre los US$20.000 millones. Es hasta casi ofensivo que nos traten de esa manera. Nosotros estamos trabajando como habitualmente trabajamos. Según me dijeron hoy, a mediados de julio lo que se viene comercializando es lo de esta época del año. Por otro lado, gran parte de lo que se cosecha de los productores se entrega a los acopios, a las exportadoras, o sea, está siendo totalmente normal como se está desarrollando esto”.
Además, agregó que: “No es función nuestra estar dando ideas y opinando sobre qué es lo que hay que hacer. Lo que sí estamos seguros es que con esta brecha cambiaria se hace muy difícil poder trabajar”, puntualizó el dirigente.
Por su parte, Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), también protestó por los dichos de Alberto Fernández. “Lamentablemente, en un momento tan difícil con lo que está viviendo el país, el Gobierno sigue buscando culpables de los errores que está cometiendo y siempre la busca en el campo, que es el sector que siempre estuvo poniéndole el hombro en el país y de ninguna manera estuvo especulando nunca”, expresó.
Días atrás, el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), Gustavo Idígoras, reconoció públicamente que hay 29 millones de toneladas que aún no fueron vendidas de la cosecha de soja.
Se trata de 29 millones de toneladas que están guardados en silobolsas en los grandes campos, mientras las grandes patronales del agro presionan por una devaluación y por quita de retenciones. Pretenden una rebaja de al menos 10 puntos de retenciones a las exportaciones de soja por un tiempo determinado. “Puede tener algún sacrificio fiscal si la urgencia del Gobierno está vinculada con el ingreso de divisas”, declaró Idígoras, quien dejó en claro que cualquier incentivo fiscal debe estar “por encima de las expectativas devaluatorias”.
En tanto, mientras el Gobierno solo se queja y mira con una enorme pasividad como las ventas de soja han caído -que debilita la recaudación que tenía prevista y le complica los acuerdos con el FMI-, las grandes patronales actúan de manera coordinada y consciente de sus propios intereses. Presionan a un Gobierno que ha demostrado en más de una oportunidad ceder ante el reclamo de los grandes capitales.
Mientras 17 millones de personas son pobres en el país, las patronales del campo juegan con la crisis para obtener mayores ganancias.
Es por eso que es indispensable fortalecer la organización y la coordinación de todos los sectores en lucha, redoblando la unidad y la pelea por imponer un plan de lucha a las centrales sindicales contra el ajuste del Gobierno, los grandes empresarios y el FMI. |