La vuelta a clases, después de vacaciones de invierno, comenzó con una serie de movilizaciones en varios liceos de Santiago, contando al Instituto Nacional dentro de ellos.

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Partiendo la semana con un estudiante detenido, y que hasta el gobierno de Boric, junto a la alcaldesa del Partido Comunista,Irací Hassler se pronunciaran en contra de los incidentes, saliendo a anunciar medidas legales para los involucrados, represión que se expresa también hoy en la Araucanía, con los milicos en el Wallmapu, igual que Piñera y que el ex alcalde de Santiago Arturo Alessandri, con el aula segura y los pacos en el establecimiento.

Desde la dirección del Instituto Nacional, también decidieron tomar medidas sancionatorias para todos los involucrados en las turbulencias que generó la movilización del día lunes,

Una de estas medidas será exigir pase escolar o el certificado de alumno regular para poder entrar al establecimiento. La dirección del establecimiento anunció mediante una declaración que:

“Ante este tipo de situaciones, la Dirección del Establecimiento aplicará las máximas sanciones que nos permita nuestro Reglamento interno de Convivencia Escolar, además de seguir todas las acciones legales que correspondan para identificar a los responsables y sancionar estos hechos de violencia, que ponen en riesgo a toda la comunidad. Una de las primeras medidas a implementar, es que, a contar del martes 26 de julio, se solicitará acreditar la calidad de estudiante del Instituto Nacional, por lo que se debe tener a mano el pase escolar o el certificado de alumno regular (en papel o digital), que serán solicitado al momento del ingreso” (La tercera)

Estas son medidas de control totalmente represiva y que solo criminaliza la movilización, de forma punitiva, en vez de hacerse cargo de los problemas reales que les estudiantes vienen denunciando hace años, y que sobrepasan el establecimiento, sino que son problemas que nos ha traído la educación de mercado.