www.laizquierdadiario.com / Ver online / Para suscribirte por correo hace click acá
La Izquierda Diario
7 de agosto de 2022 Twitter Faceboock

Opinión
Editorial de editoriales: el Plan M
Jesica Calcagno | @Jesi_mc

Foto: Mariana Nedelcu

Los lineamientos económicos del nuevo gobierno del Frente de Todos con Sergio Massa en el centro. Objetivos, alcances y desafíos de una precariedad sostenida. La calle está agitada: el blindaje mediático a la lucha docente que tendrá su primer paro nacional de CTERA bajo esta gestión.

Link: https://www.laizquierdadiario.com/Editorial-de-editoriales-el-Plan-M

¿Cuántas M hay en el plan?

Sergio Massa asumió formalmente como superministro esta semana, y se acabó el misterio de los lineamientos económicos y la orientación que viene. Con la confirmación de las metas impuestas por el FMI, insistió con el camino de ajuste fiscal con un agravante: se viene un tarifazo recargado, más duro que el promovido por el renunciado ministro Guzmán. Se combina con un “torniquete monetario” que implicará nuevos factores recesivos para la economía, y la promoción de más beneficios a los grandes empresarios, incluyendo a los especuladores financieros con una nueva oferta para renegociar la monumental deuda en pesos. En este podcast de La Izquierda Diario, hacemos un análisis de los anuncios con las opiniones de Alejandro Bercovich (Pasaron Cosas, BaeNegocios), Leandro Renou (Página 12, IP Noticias), y Pablo Anino (El Círculo Rojo).

En los análisis, algunos prefieren conformarse bajo el paraguas de que el gobierno estaría resistiendo hacer una devaluación. Aunque nadie pone las manos en el fuego de que esté descartada. Diego Genoud en La Política Online lo pone en estos términos: “El gobierno niega por ahora la devaluación pero la frazada es corta y nadie puede garantizar que el escenario extremadamente complejo que debe gobernar el superministro ofrezca margen para lanzar un plan por etapas”. Hubo voces que pusieron el énfasis en otro lado. Como la de Daniel Tognetti: “es un programa que tranquilamente podría haber presentado una fuerza política que no sea el Frente de Todos. Algunos aspectos serían bastante compatibles con Dujovne o Prat Gay”, dijo en referencia a los dos ex funcionarios de Mauricio Macri.

Es el peligroso “consenso del ajuste” del que viene hablando el Frente de Izquierda, y que recordó nuevamente Myriam Bregman en la Cámara de Diputados cuando esta semana Sergio Massa organizó su ¿fiesta? de despedida. “¿Quién decidió que la única salida posible es con ajuste?” preguntó la diputada. Quienes votaron al Frente de Todos, allá lejos por el 2019, no fue con este mandato. El resultado de las legislativas del 2021 dieron este mensaje castigando en las urnas al oficialismo. Y antes, también se expresó con la derrota de Mauricio Macri. Desde las propias filas de Juntos por el Cambio, hay quienes asocian la salida de su gobierno, sobre todo por los tarifazos y la reforma jubilatoria que desató la movilización callejera. ¿Por qué se insiste entonces con las mismas recetas? La democracia capitalista ya degradada y su personal político, abusa cada vez más del deporte de ir contra la voluntad popular.

En las bases de la ruptura sistemática de los “contratos electorales”, están los intereses económicos que se buscan preservar. Algo que explica la enorme transferencia de ingresos con Macri y el Frente de Todos: sacarle a los trabajadores para darle a los grandes empresarios. Así lo muestra con datos el difundido informe de CIFRA, de la CTA.

Horacio Rovelli en El Cohete a la Luna hace la conexión entre modelo - plan - medidas anunciadas. El modelo económico es “extractivista, agropecuario exportador y financiero, merced a la renta del subsuelo, del suelo y la creada por la legislación vigente a favor del sector bancario, bursátil y cambiario. Es un modelo orientado y dependiente del exterior y, por ende, requiere de costos internos baratos” (en referencia a la mano de obra). Continua con el plan, que es “el acordado con el FMI”. Las medidas anunciadas por Massa, dice Rovelli, “se insertan en el plan y se subordinan a la prosecución del modelo”.

La lógica de hierro de esta conexión, se corona con el último orejón del tarro de las filminas del superministro, que hablaban de crecimiento con inclusión social. Una frase tan trillada como la de cambiar planes por empleo, gastada por los mismos que atacan a las organizaciones sociales. Nadie se lo cree. Mario Wainfeld en Página 12 define que “el capítulo social fue el más flaco de la presentación de Massa. El objetivo de ´crecimiento con inclusión´ funge de momento como propósito”. El “momento” no fue antes, no es ahora, y no parece que vaya a ser después. Rovelli sostiene que directamente “no es creíble cuando se plantea un severo ajuste fiscal”. En la ecuación hay que agregar los pronósticos de una recesión de la economía, que le sacan más credibilidad a esa promesa.

Los próximos días, Sergio Massa espera anunciar algunos “refuerzos” para trabajadores y jubilados. Un reconocimiento de que los ingresos de las mayorías se siguen licuando (ajustando) con la inflación que seguramente marque un nuevo récord en las estadísticas del Indec el jueves. La suba de precios de julio se espera que esté entre el 7,5% y el 8,5%. Mientras tanto, el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCi) que releva la inflación del conurbano en comercios de cercanía, ya calculó que los alimentos subieron un 11% en julio (y acumulan un 58% en lo que va del 2022).

Casi en simultáneo, el superministro prepara una nueva oferta para los especuladores financieros. Marcelo Di Bari cuenta en Tiempo Argentino los “nuevos instrumentos” que ofrecerá el gobierno a los tenedores de deuda en pesos. “Estarán emitidos en dólares, pero se pagarán en pesos, y se ajustarán por inflación o por la cotización del dólar mayorista, el más alto de ambos índices”. En criollo, ofrecerán a los llamados “mercados” mejores márgenes de ganancias: atadas a la inflación o la devaluación, según cuál suba más. La timba financiera se juega con el hambre y la pobreza. ¿No es un llamado a nuevas corridas cambiarias que piden devaluación? ¿No es un llamado a apostar a seguir con la remarcación de precios?

Está cantado antes de concretar nuevos anuncios, quién se va a seguir llevando más de la torta.

La alternativa al plan M y al modelo económico que está en sus bases, está en manos de las y los trabajadores. Fernando Scolnik en el Semanario Ideas de Izquierda pone sobre la mesa otra salida a la crisis y la fuerza social que puede conquistarla.

Incógnitas y certezas

Actores importantes de las finanzas internacionales se pronunciaron en seguida sobre los anuncios de Sergio Massa. Les pareció poco ajuste, porque quieren la devaluación. Los ecos de sus pedidos aparecen en La Nación de la mano de Joaquín Morales Solá. Con una queja, casi calcada del comunicado Goldman Sachs, dice “No anunció, en cambio, ninguna medida cambiaria; por el contrario, descartó una devaluación del dólar oficial”. Juntos por el Cambio, cuida un poco más las formas aunque se pronunció en la misma dirección “falta un plan de estabilización”.

Uno de los objetivos centrales de Sergio Massa es hacerse de dólares para sumar a la caja pinchada de reservas del Banco Central. Si sigue perdiendo reservas al ritmo de la primera semana del superministro, dice Genoud, “en 10 días se quedará con saldo negativo, según los cálculos de la consultora Eco Go”. Por eso los ojos están puestos en la Mesa de Enlace, de la que son parte los sojeros sentados en las silobolsas. Hasta ahora, el “dolar soja” no los incentivó a liquidar, y Massa los convocó elogiosamente y entre algodones a reunirse a negociar. El encuentro iba a producirse el pasado viernes, pero se suspendió. Mario Wainfeld habla de “silencios sugestivos” del sector por el momento, de lo que interpreta que “las tratativas están en pie, que la mesa sigue tendida”.

Los que festejaron sin ninguna duda son los empresarios de la energía que se hicieron presentes en la asunción de Massa: Vila y Manzano de Edenor, y Marcelo Mindlin de Pampa Energía. El caso de este último, es paradigmático: es el 2º en la lista de los más fugadores de dólares en la era Macri. Negocios son negocios.

Restan ponerse a prueba los vínculos de Sergio Massa con Estados Unidos y otros inversores internacionales. Prepara una gira por Washington, París y Qatar en dos semanas aproximadamente, que incluirá la búsqueda de concretar el encuentro suspendido entre Alberto Fernánez y Joe Biden.

El entramado peronista tiene a sus propios actores evaluando su juego. Si por el momento el mensaje es de cerrar filas para mostrar “unidad en la política” que de sustento al plan M, hay tensiones latentes.

Los gobernadores prendieron algunas alarmas: las tijeras del ajuste fiscal puede comprometer la transferencia a las provincias. Será una negociación.

La CGT está entre el apoyo y la advertencia. Ratificó la movilización del 17 de agosto, aunque se pone en duda cada dos por tres, y ni la dirigencia sindical tiene claro con qué reclamos convocarla. Más que para defender los bolsillos de la clase trabajadora, es una “marcha comodín” al servicio de sus propias internas de poder. Por estas horas, la polémica está sobre el otorgamiento de sumas fijas, que promueven Massa y Cristina Fernández. Horacio Verbitsky en El Cohete a la Luna dice que “la CGT no acepta que ese alivio preceda a las paritarias”. Más precisamente, Daer, Cavallieri, Rodríguez son quienes se resisten. Pablo Moyano está en el medio: quiere su poder en las paritarias, pero acepta la suma fija. Tanto la CGT como la CTA fueron del convite en la asunción de Massa. Hugo Yasky se encargó de saludar a las cámaras antes de ingresar. Verbitsky resalta otra foto: la del ex Secretario General de la UOM, Antonio Caló, “entre el titular de la Cámara de la Construcción, Gustavo Weiss, y el representante de las empresas alimenticias de capital extranjero, Daniel Funes de Rioja”.

Desde el cristinismo y La Cámpora hubo una definición de dar mensajes de apoyo, dejando abiertas otras incógnitas. Al ya comentado y ratificado rol de Cristina Fernández en la decisión de poner a Massa al mando, se le sumó la foto que publicó desde la cuenta del Senado. Desató el oficio del análisis político de las fotografías: destacando la “distancia” que buscó mostrar la vicepresidenta en la simbología de una puesta en escena. Una foto que apareció con Massa, que no estuvo con Batakis. Fue Andrés “Cuervo” Larroque, funcionario de Kicillof, quien eligió pronunciarse después de los anuncios económicos, con un afectuoso “fuerza compañero” dirigido al superministro.

Entre las interpretaciones de nuevo rol del cristinismo en el Frente de Todos, está la de Martín Rodríguez en El DiarioAr. Define que “la peña ´ideológica´ se interrumpió con Massa, para solucionar la parte política de la crisis en una tercerización deseada: la del pragmatismo. Massa asume el giro pragmático que el cristinismo no decía pedir (incluso criticaba a quien osara nombrarlo), pero que a la vez necesitaba por un mantra clásico: nadie está dispuesto a volver al llano así como así”. Diego Genoud lo analiza desde una vicepresidenta acorralada por el riesgo del abismo, que “ofreció todo el apoyo que le puede dar a un plan de austeridad”.

Alfredo Zaiat en Página 12 vuelve sobre sus pasos del pasado domingo, para explicitar los objetivos de “la apuesta pragmática de CFK”. Identifica tres: evitar que un gobierno peronista termine anticipadamente su mandato, mantener ciertas chances electorales 2023, al menos resistir en la provincia de Buenos Aires. La vara está más baja que nunca. Especialmente cuando se busca contraponer a la posibilidad de que vuelva Juntos por el Cambio a la Casa Rosada, cuando es el éxito del plan Massa el que puede allanarles el camino. Claudio Mardones en Tiempo Argentino cuenta que es precisamente la lectura que hacen desde el entorno de Horacio Rodríguez Larreta.

En La Nación, Maia Jastreblansky pone en palabras de un dirigente de la coalición oficial de buena relación con todos sus socios, otra definición: “Cristina encontró en Massa la mejor herramienta para neutralizar políticamente a Alberto y no caer ella también. Y Massa tiene la viveza de consolidar una relación con ella y adaptarse a sus reglas”. Agrega que “Para sintonizar con la vicepresidenta, Massa incorporó a su ronda de charlas con economistas (...) a Axel Kicillof.

Pablo Ibáñez en El DiarioAr, sostiene que “El respaldo del cristinismo a la segmentación que anunció Massa, mucho más dura que el de Martín Guzmán (...) sirve como pista de que la vice conoce y validó el decálogo de medidas”. A su vez, condiciona la continuidad de ese apoyo a que Massa respete “el plan tallado”.

Falta saber cómo quedará configurada la Secretaría de Energía, de fuerte presencia cristinista, que tendrá a cargo la implementación de la segmentación y el tarifazo. Hasta el momento se sabe qué Darío Martínez no va a continuar pero no se confirma quién irá a reemplazarlo. Ibáñez asegura que la fecha límite será este jueves, cuando se anuncie la ejecución de la segmentación de energía. Suena la posibilidad de que el reemplazante sea Federico Bernal, del entorno de la vicepresidenta. Van Der Kooy en Clarín recuerda que fue “el único que estuvo presente durante los anuncios de Massa” de su espacio.

Sergio Massa aún tiene que confirmar quién será el viceministro de Economía. Una duda que queda tras el “affaire” del convocado y des-convocado Gabriel Rubinstein. Entre las risas en las redes sociales que le pedían como primer medida “prender fuego su cuenta de twitter”, apareció una preocupación. ¿Cuántos “no” recibió Massa antes de llegar a Rubinstein? La ausencia de varios nombres que parecía prometer Massa en su gabinete (Roberto Lavagna, Martin Redrado, Miguel Peirano, Diego Bossio), generan cierta desconfianza inicial de quienes están empecinados en conformar a los mercados.

¿Consenso de quién?

Con nuevas definiciones sobre la mesa de la orientación económica y social del gobierno, los distintos actores mueven sus fichas y copan la agenda pública. Con tonalidades y matices, confluyen en una misma voz: la del ajuste contra el pueblo trabajador. En todo caso debaten los grados o la velocidad.

Hay otra voz que empieza a retumbar. Lo cuenta Lucho Aguilar en Ideas de Izquierda: el debut de Massa en las calles de los saqueados. La de las y los docentes en 8 provincias movilizadas, con nuevos procesos de autoconvocados. La bronca por salarios de miseria crece: en Mendoza las maestras que recién se inician ganan apenas 47 mil pesos. Aparece el apoyo de las familias que activaron sus grupos de whatsapp: “Ahora nos toca a los padres apoyar a los docentes. Sumate no enviando a tus hijos a clases los días de paro”. Se multiplican las cadenas de mensajes para hacer colectas para las y los docentes, y que puedan enfrentar los descuentos del gobierno provincial que busca quebrar la huelga. La fuerza de la movilización docente impuso el primer paro de la CTERA a este gobierno: será el 10 de agosto.

El blindaje mediático a la lucha docente es funcional a la agenda de los que solo quieren discutir los términos del ajuste. Las movilizaciones son masivas en muchas provincias, pero una vez más, se le da más prensa y visibilidad a un grupo de 20 personas identificadas con la ultraderecha, que tiran polenta y gritan en las puertas del Congreso y la Casa Rosada.

Y no son las únicas protestas y reclamos las de la comunidad educativa: las organizaciones sociales opositoras y en los barrios populares, vitivinícolas, trabajadores y trabajadoras de la salud, neumático, portuarios, en call center, entre otros. Ellas y ellos se anotan del otro lado del “consenso del ajuste”.

La Izquierda Diario es el único lugar donde se puede encontrar todo lo que pasa por abajo y en todo el país. Es parte de una pelea por reconocer la propia fuerza de la clase trabajadora y los sectores populares, coordinarla y unificarla, desplegando un plan alternativo en beneficio de las mayorías. En momentos de mayor blindaje mediático, el rol de nuestros lectores y lectoras, de quienes comulgan con las ideas de la izquierda o buscan expresar su oposición a los planes de ajuste, necesita de mayor protagonismo. Porque la voz que falta en la escena nacional está, y empieza a ponerse en movimiento.

El “consenso del ajuste” podrá existir en las alturas del poder económico y político. La realidad en los ajustados es otra. Es la que tiene el poder para que la tortilla se vuelva.

 
Izquierda Diario
Seguinos en las redes
/ izquierdadiario
@izquierdadiario
Suscribite por Whatsapp
/(011) 2340 9864
contacto@laizquierdadiario.com
www.laizquierdadiario.com / Para suscribirte por correo, hace click acá