De esos temas hablamos en la columna sobre noticias internacionales del programa de radio El Círculo Rojo, que se emite todos los jueves de 22 a 24 hs por Radio Con Vos.
El sindicato Royal College of Nursing (RCN), que representa a alrededor de 465.000 enfermeras registradas, parteras y asistentes de atención médica en el Reino Unido, dijo que recomendará a sus miembros que apoyen la moción de huelga en la votación que comienza este jueves 15 de septiembre y se extenderá durante cuatro semanas.
Cuando leía sobre esta primera huelga de las enfermeras en Reino Unido me surgió una efemérides de estos días relacionado con otro hecho que fue una primera vez, la primera “huelga general” en esa parte del mundo hace 180 años.
Esa huelga que se extendió por las grandes ciudades industriales del Norte inglés, fue la primera en mostrar la fuerza social de los trabajadores combinando organización y demandas en común: reclamo de mejoras salariales, una jornada laboral más corta y reformas democráticas.
Se calcula que medio millón de trabajadores participaron, y que se extendió por lugares tan dispares geográficamente: las cuencas carboníferas escocesas, hasta el sur de Gales y llegó a cubrir 32 condados en total.
Los empresarios llamaron a las protestas como “los disturbios de los tapones”, y desde el primer momento pidieron que las autoridades repriman para garantizar la vuelta al trabajo.
La huelga está repleta de detalles: los mineros del carbón cumplieron un rol destacado, ya que sin carbón no se podría mantener las máquinas. Los textiles le sacaban el tapón a las máquinas de vapor.
Lo más interesante de la huelga es el papel que cumplen las primeras organizaciones políticas de los trabajadores. Es clave el rol de los "cartistas".
Así se llamaba al movimiento que presentó La Carta del Pueblo, una petición que establecía seis puntos que constituían sus demandas de reforma democrática: voto secreto para todos los hombres mayores de 21 años, eliminar los requisitos de propiedad para los diputados y que cobren por su trabajo, igualar el tamaño de las circunscripciones y que los parlamentos sean anuales.
Así los trabajadores fueron a la huelga para conseguir mejores salarios y una jornada laboral más corta, pero también se declararon en huelga para conseguir sus demandas políticas, una unión de los ámbitos político y económico de la lucha que fue innovadora
Pasaron 180 años desde esa primera huelga general, aquel verano del descontento de 1842, pero esa gran acción dejó debates y conclusiones que actualizadas a la actualidad son importantes.
La solidaridad y la organización del movimiento obrero tienen la capacidad de poner las reivindicaciones políticas y económicas en el centro de la conversación nacional y mucho más, pueden poner en debate y transformar el destino de un país. |