A partir de este jueves, Gabriel Boric y un equipo de asesores comenzarán una intensa gira por las regiones de O’Higgins, Maule y Ñuble como parte de la política de “recorrer todo el país”, que anunciara Boric al comienzo de su mandato. Pero esta gira tiene un tinte diferente a las que ya se han realizado.

Esta vez, Boric comienza una gira en un escenario complejo. Faltando pocas semanas para el plebiscito constituyente, el gobierno necesita seguir respaldando la opción del apruebo ya que parte de su legitimidad se juega en la victoria de dicha opción.

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Además, el gobierno necesita dar legitimidad social al acuerdo adoptado por los partidos oficialistas. Esto, en torno al compromiso de reformas constitucionales que solo buscan complacer a los sectores del rechazo y a los “amarillos por Chile”, en temáticas como propiedad de los fondos pensiones, el negocio de la educación particular subvencionada, los millones de recursos públicos que van a parar al sistema privado a través del sistema de transferencias, entre otros temas.

Dicho acuerdo, que ha sido criticado incluso por sectores del oficialismo, no es más que el revivir la política de la Convención Mixta, opción que menos votos obtuvo en el plebiscito de entrada, ya que serán los partidos del régimen quienes acordarán la moderación de un proyecto constitucional que ya es moderado.

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Por eso la gira del gobierno tiene como base, apuntalar a los sectores que ven con preocupación, y bastante legítimo, que este acuerdo termine sepultando las pocas esperanzas que tenían en los cambios constitucionales. No por nada Boric visitará durante estas semanas, tres regiones donde el rechazo, según las encuentras, tiene una amplia ventaja sobre el apruebo y que son claves para intentar revertir el escenario que se proyecta hoy.

A pesar de que las encuestas vienen mostrando un estrechamiento en el voto, entre las opciones Apruebo y Rechazo, la verdad es que el clima pareciera ser que el rechazo se impondría sobre el apruebo y por eso para el gobierno será de primera importancia lograr convencer a los indecisos y acallar a los sectores críticos.