Jóvenes secundarios de distintos liceos (La chimba, la portada, D-121, LEA, etc) junto a universitarios y jóvenes trabajadores, se reunieron el viernes 19 para discutir cómo organizarse frente a distintas problemáticas, como el alto costo de la vida, los derechos sexuales y reproductivos, y la xenofobia creciente en la ciudad de Antofagasta.

Betsabé Bastidas, estudiante de derecho y parte de la agrupación Vencer, hizo un llamado a que “nos organicemos y levantemos una juventud que quiera darlo vuelta todo. Que pelee junto a la clase trabajadora por nuestros derechos, sin confianza en el Gobierno de Boric que sólo ha respondido con migajas a nuestras demandas, o con represión como lo vimos con el pueblo mapuche”

Un compañero secundario migrante, expresó lo difícil que es vivir en medio del aumento del costo de la vida y la discriminación, teniendo que vivir en campamentos con el temor a ser desalojados por el xenofóbico alcalde Jonathan Velasquez, quien ha fortalecido una campaña contra los migrantes.

Asimismo, otra compañera secundaria indicó que era “ya hora de organizarse, que siempre nos dicen que tenemos que conformarnos o que por ser jóvenes no sabemos, nos tratan como si no supiéramos nada”

También hubo críticas a cómo hoy los centros de estudiantes funcionan como centros de eventos, alejados de los problemas de los estudiantes, cuando tenían que jugar un rol de organizar para pelear por nuestras demandas.

Hoy queremos construir una juventud revolucionaria que pelee por el derecho al aborto legal, libre, seguro y gratuito, por una educación gratuita, democrática, laica y no sexista, por los derechos de las disidencias sexuales y de la clase trabajadora. Una juventud que también se plantee acabar con este sistema capitalista de explotación y opresión, sin confianza en el Gobierno de Boric y la Convención, que hemos visto que mientras nos prometen derechos, mantienen en pie todo el modelo económico heredado de la dictadura.

Para enfrentar a la derecha de manera consecuente es necesaria la organización, unidad y movilización porque nunca nos han regalado nada. El hecho de que las demandas de octubre no estén resueltas y que ni la Convención ni el Gobierno las han buscado resolver, sino por el contrario, la clase trabajadora está pagando el costo de la crisis.

Por eso, en esta reunión se ha resuelto:

1. Impulsar una juventud revolucionaria con independencia de clase. Que frente al desvío constituyente se ubique con una alternativa independiente de la clase trabajadora, ante las dos vías de la burguesía para cerrar lo que se abrió en octubre. Por una juventud que no se resigne ante el Gobierno actual.

2. Levantar un gran Encuentro de la juventud anticapitalista y socialista con difusión en liceos, escuelas y universidades, este 8 de octubre.