“Vamos a colaborar con toda investigación que nazca de una denuncia” así señaló el Ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Giorgio Jackson, a propósito de la denuncia que interpusieran en su contra por la impresión de 700 mil ejemplares del proyecto de nueva constitución y que se estarían entregando a la ciudadanía.

La denuncia, interpuesta por el diputado Juan Irarrazabal del partido Republicano, pretende procesar al ministro por malversación de fondos públicos por un monto que supera $444 millones de pesos, monto que sería el valor total de los ejemplares impresos.

Esta querella es parte de la estrategia que la derecha ha desplegado para golpear al gobierno de Boric y al Apruebo, buscando deslegitimar dicha opción a propósito de denuncias de intervencionismo y en este caso de supuesta malversación de fondos.

Por otro lado, el gobierno y el oficialismo siguen poniendo sobre la mesa la las supuestas bondades del apruebo sin hablar mucho del acuerdo entre los partidos para reformar el proyecto y moderar los elementos que le molestan a la derecha y los sectores de centro.

Todas estas denuncias cruzadas no son más que parte del clima de tensión que se ha instalado a pocas semanas del plebiscito y que dicen poco de los padecimientos que esta sufriendo la clase trabajadora y los sectores populares.

Mientras la derecha y el gobierno se denuncian mutuamente, durante el último trimestre la clase trabajadora tuvo una pérdida histórica del poder adquisitivo, la inflación no da tregua, los nuevos empleos son precarios y las condiciones de vida se vuelven cada vez más crudas.