El excandidato presidencial de Chile, en caso si gana la opción rechazo propone una nueva constitución, con un comité de expertos apoyado por el congreso. En el programa de Mesa Central, donde se conversó sobre qué espera del proceso constitucional si se impone la opción Rechazo en el plebiscito de salida, aclaró que su “posición es avanzar en un proceso constitucional que sea de origen democrático” señalando que en menos de un año podemos tener una nueva Constitución, pero ahora sí que sea la casa de todos y no solamente de un sector político”. Siguen con lo mismo de siempre, con salidas añejas, de las cuales son caladas de la herencia de la dictadura.
La campaña enorme del rechazo, donde la encabezan los empresarios de Chile
Millones de personas abrigan la esperanza de que un cambio constitucional podría abrir las posibilidad de modificar la herencia de la dictadura, sin embargo esto no puede quedar en manos de los políticos que por 30 años utilizaron el régimen para proteger los negocios empresariales, es decir, un Chile basado en privilegios para los grandes millonarios.
Las demandas que el estallido social puso a la orden del día no se satisfacen con la nueva carta magna y aún así ya se ensayan proyectos de reforma para moderarla aún más.
Pero aun así como pasan los días, con un gobierno y oficialismo que se prepara cada vez más, a la posibilidad del triunfo del rechazo, junto con moderar cada vez más su discurso frente a las expectativas de amplios sectores del pueblo trabajador.
El resultado del 4 de septiembre no los va a calmar, sea que gane el apruebo o el rechazo, según dice el presidente de la Cámara de la Producción y el Comercio, el odioso Juan Sutil, Chile va a tener turbulencias.
Para hacerles frente el gobierno y sus partidos pretenden calmarlos mediante un nuevo pacto para “aprobar para reformar”, que no es nada más que negociar con la derecha y entregarle al Senado la posibilidad de borrar y reescribir lo que se vote el 4 de septiembre.
Los trabajadores y los sectores populares, incluyendo a quienes guardan expectativas de cambio, tienen que confiar en sus propias fuerzas para conquistar las demandas pendientes del estallido social y que fueron olvidadas arrojadas a la basura por la convención. |