Muy temprano en la mañana, Gabriel Boric confirmó su voto desde Punta Arenas y llamó a "convocar a una amplia unidad nacional de todos los sectores, de las organizaciones sociales, de la sociedad civil, de los partidos políticos, queremos escuchar todas las voces para pode seguir adelante con este proceso".
El vocero de gobierno, Giorgo Jakson, afirmó: "En cualquiera de los escenarios nosotros por supuesto que hemos estado preparados, tanto en el caso que salga la opción del apruebo como la opción del rechazo, de poder llamar a la unidad (...) El día de mañana, el día lunes, tenemos que estar todos y todas juntos, tratando de que nuestro país mejore la calidad de vida para todos los ciudadanos, al menos desde el Gobierno estamos en plena disposición y también hemos escuchado señales del oficialismo y la oposición de que mañana, independiente del resultado, tratemos de ponernos de acuerdo en un camino que avance hacia esos cambios que la ciudadanía tanto quiere".
Desde un clima de unidad nacional se ha preparado desde los últimos días desde el palacio de La Moneda en miras hacia el resulta del Plebiscito. De esta manera, lo que busca el gobierno es establecer alianzas para un gran acuerdo nacional con los partidos que han gobernado estos últimos 30 años en favor de los empresarios.
La moderación y el giro del diálogo hacia el centro ha sido el discurso de los ex presidentes de los partidos políticos de los 30 años, donde el gobierno junto con la oposición unificaron el discurso con el fin de no polarizar las opciones "Apruebo" y "Rechazo".
Eduardo Frei (DC), quien anteriormente había anunciado su opción por el Rechazo dijo esta mañana: "Creo que Chile se merece tener paz para progresar, y yo creo que a partir de mañana, como ha sido el anhelo de todos los chilenos y chilenas, es tener una nueva Constitución."
En este mismo clima, Michelle Bachelet (PS), quien anunció públicamente su apoyo al Apruebo en la franja electoral, llamó a "dialogar" desde Ginebra haciendo un guiño a los dichos de Boric: "cualquiera sea el resultado de este proceso, todos saben cuál es mi opción, seamos capaces de sentarnos a conversar, a dialogar. Entendiendo que tenemos diferencias, hay opiniones diferentes, pero que sepamos cómo trabajamos esas diferencias, porque Chile es de todos nosotros".
Por su parte, Ricardo Lagos y Piñera llamaron a no volver a las calles, llamando a estar disponibles para la decisión de Boric.
Se trata de moderar las expectativas de las demandas de la rebelión desde la consecuencia lógica del desvío constituyente y un esfuerzo del régimen por revivir la política de los consensos que rigió al país desde el fin de la dictadura bajo el consenso neoliberal.
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