Mediante una resolución, el Banco Central (BCRA) dispuso que aquellas cerealeras, acopiadoras y demás empresas relacionadas a la exportación de granos que hayan vendido a través del “dólar soja”, que les ofrece un tipo de cambio diferencial de $ 200, no podrán acceder al mercado de cambio en ninguna de sus variantes. Tendrán prohibido operar través de las modalidades financieras (dólar MEP o “contado con liquidación”) y tampoco podrán comprar “dólar solidario”.
El Gobierno, luego de haber logrado que los sojeros liquiden USD 4.000 millones, intenta frenar la escalada de los dólares paralelos, alertado por la subas de este lunes que llevaron al CCL (contado con liquidación) por encima de los $ 300. La norma que publicó el BCRA comienza a regir este martes, 20 de septiembre, y no tiene fecha de finalización.
“Los agentes económicos que hayan vendido soja en el marco del Programa de Incremento Exportador no podrán acceder al mercado de cambios para compras de moneda extranjera ni tampoco realizar operaciones con títulos y valores con liquidación en moneda extranjera”, señaló el BCRA en un breve comunicado.
"La reciente medida del BCRA dirigida a cooperativas acopiadores y productores que vendieron soja a los exportadores es restrictiva y limitante del mercado cambiario, además de perjudicial para toda la cadena de la soja", replicaron desde CIARA, la entidad que nuclea a aceiteros y exportadores, a través de un comunicado.
La medida sorprendió porque la norma del plan de austeridad del Frente de Todos es de constantes beneficios al sector agroexportador. Más inesperado aún fue el tuit del Secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, revirtiendo en parte el alcance de la comunicación oficial del BCRA comandado por Miguel Pesce. ¿Inicios de una nueva interna en la coalición gobernante?
El Gobierno había logrado un respiro en relación a la crítica situación de falta de divisas en las arcas del BCRA, pero los pesos otorgados a las patronales agrarias fueron volcados a la compra de dólares en el mercado paralelo, principalmente en los financieros. Se espera que el impacto despierte el dólar blue. Todos los caminos parecen apuntar a que evitar una brusca devaluación de la moneda no será nada sencillo para el Gobierno. Seguir los lineamientos del FMI, una vez más, no genera ninguna solución de fondo para las grandes mayorías del país.
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