Uno de los lugares donde se inició el fuego el pasado 6 de septiembre fue la Finca Perales, en Yuto. Al lado de la misma se encuentra el asentamiento guaraní, Barrio Sur; hoy volvieron las llamas y amenazan las precarias viviendas (casillas de madera), habitadas por trabajadores rurales de la zona y familias.
En un vídeo enviado por Socorristas voluntarios se puede ver el fuego avanzando, ya ha arrasado con 8000 hectáreas hasta la fecha, mientras que el Gobernador de la provincia recorre Europa hablando de una Jujuy verde.
Desde el inicio de estos incendios, las mujeres y jóvenes indígenas, trabajadores de las áreas de reserva, rurales, y bomberos voluntarios, apuntaron a que los mismos fueron provocados y que este accionar de sectores privados cuenta con el respaldo del Gobierno que en los hechos no actúa para prevenir.
En Barrio Sur no es la primera vez que el fuego amenaza con llegar a las casas, en su momento los vecinos impidieron que las llamas avanzaran con baldes y el agua que sacaban de las viviendas de madera. Y afortunadamente los vientos jugaron a favor de las familias, muchas guaraníes, direccionando el fuego para el lado contrario.
En el lugar ya trabajan brigadistas y una avioneta hidrante a fin de contener el avance del fuego. Hasta el momento no se informaron daños materiales ni heridos producto de este hecho, pero se informó que el humo está afectando la visibilidad de rutas y caminos aledaños, cómo la Ruta N°34
Cuando el diputado nacional por el PTS-FIT Alejandro Vilca recorrió la zona, junto a Natalia Morales y Miguel López, referentes locales, los trabajadores de Parques Nacionales resaltaron que el ajuste en el presupuesto impide un mejor trabajo para la protección del área protegida. Para el 2020 la institución en Calilegua recibió sólo 8 millones de pesos, totalmente insuficiente para las distintas tareas y funciones de cuidado y prevención en territorio. Dieron cuenta del avance de la frontera agropecuaria en la zona de reserva, de los contínuos incendios cerca del corredor biológico Sausalito que une las yungas con la ecoregión del chaco, importante en su rol para el desarrollo biológico de la flora y fauna del lugar.
Es decir que, si las condiciones climáticas anticipaban estos escenarios, a lo que se suma al accionar intencional de sectores del campo, como el agroindustrial y finqueros, que practican la quema para limpieza, cosecha y con el objetivo de extender la frontera agropecuaria sobre bosque nativo, quedan muchas respuestas a saber por parte del Gobierno provincial y nacional, que tienen responsabilidades en el tema. Porque no sólo es quién lo hace, si no si se lo deja hacer, y en este tema, existen intereses capitalistas del sector del agronegocio que presiona por estas vías sobre áreas degradadas.
El estado es responsable, el gobernador Gerardo Morales y el ministro de Ambiente Juan Cabandié tienen que poner todos los recursos y fuerzas para combatir y apagar el fuego; y ayudar a las familias afectadas inmediatamente.
Desde el PTS FIT sostuvimos desde el inicio de esta situación que los incendios son políticos. Y planteamos la necesidad de una Comisión investigadora independiente compuesto por especialistas del INTA Yuto, de Parques Nacionales, de la UNJu, junto a organizaciones ambientalistas, bomberos voluntarios, rurales organizados en la UATRE y comunidades indígenas, para ir al fondo y dar con los responsables del incendio. |