De esos temas habló Diego Sacchi en su columna sobre noticias internacionales del programa de radio El Círculo Rojo, que se emite todos los jueves de 22 a 24 hs por Radio Con Vos.
La huelga en las principales refinerías petroleras de Francia ya lleva más de 20 días, reduciendo la producción de combustible en más del 60% en los últimos días, con una de cada tres estaciones de servicio sin poder funcionar. Los trabajadores reclaman un aumento salarial de un 10% para poder hacer frente a la inflación que ronda un 6%.
Las principales empresas, Exxon y Total, hacen propuestas muy por debajo del reclamo de los trabajadores, y con la ayuda del Gobierno y algunos medios de comunicación se buscó culpar a los trabajadores de la escasez.
El martes la primera ministra francesa (algo así como un jefe de gabinete), anunció la “requisición” de trabajadores petroquímicos ¿Qué es eso? Obligar a que se cumplan servicios mínimos en la planta de ExxonMobile en Normandía. Esta herramienta legal se creó en 1938 y es fundamentalmente un arma del Estado para romper huelgas.
Qué más pasó. Comenzó una campaña en los medios contra la huelga. Notas sobre ¿Cuánto gana un trabajador? con información que daba… la empresa. Tapas de diarios llamando “extremistas” a los huelguistas y las típicas notas de “por la huelga no hay combustible”
Obviamente no se menciona que Patrick Pouyanné, el CEO de Total, aumentó un 52% sus ingresos en 2021, llegando a una remuneración anual de 5,9 millones de euros.
Tampoco se habla de que Total Energies volvió a generar ganancias en 2021 gracias al aumento de los precios del petróleo y el gas, y que anunció un plan de recompra de acciones por 2 mil millones de euros junto a un aumento en los dividendos y una serie de inversiones. Con un ingreso netos de 16 mil millones, los resultados de la petrolera francesa alcanzaron su nivel más alto desde años récord en 2007 y 2008
Las empresas, apoyadas por el Gobierno, apostaron a doblegar la huelga, pero lo que sucedió fue que la huelga mantiene su fuerza y contagió a otros sectores.
Los ferroviarios anunciaron una huelga para el próximo lunes. También los trabajadores del transporte de París y los empleados públicos.
Forzados por la dureza de la lucha, la CGT y otras centrales sindicales convocaron a una huelga el martes 18, aunque no dejaron claro si este llamado es el comienzo de una pelea coordinada o solo una medida aislada.
El “contagió” se dió porque muchos trabajadores ven el reclamo de los petroleros como algo justo y sentido. Karim Dabaj, un trabajador ferroviario lo resumió así “Muchos ferroviarios nos sentimos interpelados por la huelga en el sector petroquímico, y pensamos que tenemos un rol que jugar en la lucha conjunta por los salarios”
Contamos sobre las huelgas en Reino Unido, lo que pasa en Francia tiene un motivo similar: de un lado empresas que no dejaron de ganar desde la pandemia, que se benefician con los aumentos de precios, del otro trabajadores que se cansaron de perder derechos.
Y vuelven a mostrar que los trabajadores tienen la fuerza y manejan los recursos claves para no ser los que paguen la crisis. |