Este 1 de noviembre se hizo efectiva la vuelta de Ferraresi a Avellaneda. Lo hace tras dejar el cargo de ministro de Hábitat y Vivienda, su reemplazante será Santiago Magiotti. Deja el ministerio con más de 3.5 millones de personas sin vivienda propia. Si bien se intenta presentar como el inicio de una nueva etapa de relanzamiento de su gestión; una especie de “Ferraresi vuelve” para ponerse al servicio de sus vecinos, la verdad es que vuelve al distrito para proteger su propia carrera política ante un posible vendaval en las elecciones del año que viene. Lo propio hizo Juan Zabaleta en Hurlingham y estaría haciendo Martin Insaurralde en Lomas.
Sucede que el gobierno del Frente de Todxs viene pagando los costos políticos de haber traicionado sus promesas de campaña y eso lo están midiendo. El malestar por los altos precios, las tarifas, la precarización laboral y la falta de perspectivas es notorio incluso en sectores de la propia base del gobierno, que en su momento lo votaron entusiasmados. Viendo lo que fueron las elecciones del año pasado donde el oficialismo perdió gran parte de su masa de votantes incluso en el conurbano donde se hace fuerte, se puede vislumbrar un 2023 electoralmente duro. Sumado a que ahora con Massa como superministro, Alberto y Cristina profundizaron el sometimiento del país al FMI. El ajuste tenderá a acentuarse y se sentirá con fuerza en el conurbano. Pueden hacerse muchas conjeturas: que Ferraresi vuelve al distrito para no perder su territorio, que vuelve para traccionar votos a favor del Frente de todxs y estos así sostener al menos la estratégica provincia de Buenos Aires frente al 2023. Lo cierto es que Ferraresi vuelve pero el ajuste sigue.
Vení a la Asamblea Abierta de Avellaneda este 11
Si el ajuste se agudiza podremos vislumbrar nuevos escenarios de lucha, como ya ahora vienen mostrando los residentes de los hospitales de CABA o lo que fue el triunfo de la lucha del neumático. En Avellaneda cobra una significación muy importante esto porque como muestra la historia, ha sido un lugar sede de importantes luchas, por ser un polo fabril y lugar de residencia de millones de trabajadores.
Sin ir más lejos este año estuvo la importante lucha de la escuela de enfermería del hospital Fiorito. Por eso el PTS en el Frente de Izquierda viene impulsando asambleas abiertas en cada punta del país.
Justamente este 11 de noviembre vendrá Myriam Bregman a la asamblea de Avellaneda. Junto a Nicole Salvatierra de la Asamblea Permanente de Guernica, estudiantes de Undav, vecinos del Docke que se organizan contra la contaminación, trabajadores de Shell, metalúrgicos, eléctricos, ferroviarios, de salud, docentes, estatales y artistas. Dicho por la propia Myriam: “Se puedan acercar aquellos y aquellas que quieran venir a discutir con la izquierda y empezar a pensar cómo salimos de esta crisis”. Las asambleas buscan ser espacios abiertos de discusión, coordinación y unidad entre todos los sectores hartos del ajuste y que no quieren resignarse. Sumate vos también a discutir la realidad del distrito y construir la asamblea.
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