Gastón Remy
| Economista, docente en la Facultad de Cs. Económicas de la UNJu. Diputado provincial del PTS - FITU en Jujuy, Argentina.
La pérdida se debe a las paritarias fijadas por debajo de la inflación acumulada. El gobierno es responsable. Pero también las conducciones gremiales que no convocan a las bases a un paro y plan de lucha. Se necesitan medidas de fuerza contra el ajuste de Morales. Para ello hay que coordinar en un encuentro provincial y nacional a todas las fuerzas sindicales, sociales, estudiantiles, del movimiento de mujeres y pueblos originarios, combativas y antiburocráticas.
Se acerca fin de año y el bolsillo siente el golpe de la inflación. Los precios no paran de subir. En el caso de los estatales esto se agrava dado el promedio de sueldos que se ubica por debajo de la línea de pobreza. Con municipales jornalizados cobrando 35.000 pesos, enfermeras 50.0000 o el personal de vialidad con básicos de 8.000 pesos.
A septiembre la canasta familiar era de 118.200 pesos (dipec) la mayoría de los estatales está en la pobreza. UPCN sostuvo que el 95% de los estatales son pobres, aunque se quedó solo en palabras. Ni una medida de fuerza para revertir esta situación.
Si miramos la evolución del salario que se toma como testigo en el caso de los estatales, una maestra con un cargo y 10 años de antigüedad, la pérdida salarial mes a mes frente a la inflación terminaría este año acumulando 43.500 pesos. Se trata de un "robo hormiga". El gobierno solo otorgó un bono de 5.000 pesos en junio. Por lo tanto, la pérdida acumulada rondaría los 40.000 pesos.
El gobierno de Gerardo Morales es responsable de este ajuste. Fija año tras año paritarias por debajo de la inflación. Mientras que los ingresos del estado por la recaudación de impuestos suben más que la inflación. El resultado es un superávit fiscal.
A junio de este año el resultado fiscal del estado provincial era positivo por 14.093 millones de pesos. Un bono de al menos 40.000 pesos para 85.000 estatales representaría tan solo el 24% de ese superávit. Fondos hay.
La cuestión pasa por organizar la fuerza social de todas y todos los trabajadores que están cansados de los bajos salarios. Este año vimos las acciones y reclamos del personal de la salud, también de los municipales y estas semanas de las y los trabajadores de vialidad. Bronca sobra, lo que falta es organización.
También sabemos que las conducciones gremiales dejan pasar las paritarias de miseria. Algunos las critican pero no hacen nada más. ¿Por qué? En el fondo se trata de una cuestión política, la mayoría de los sindicatos los conduce el peronismo, que mantiene una sociedad con Morales tanto a nivel provincial como nacional a través del Frente de Todos.
Superar todas estas trabas exige paciencia y claridad de objetivos. La pelea por que ningún estatal gane menos que la canasta familiar y que su salario se ajuste por inflación mes a mes tiene que convertirse en una gran bandera de lucha. A la par, que se da pelea por recuperar los gremios para ponerlos al servicio de las y los trabajadores. En Cedems los docentes comenzaron a mostrar que con organización y lucha se puede frenar a las burocracias.
Para impulsar todas estas peleas es necesario unir y coordinar a todos los sectores que quieran salir a luchar en todo el país. Necesitamos fortalecer la coordinación de ocupados y desocupados, junto a la juventud estudiantil y el movimiento de mujeres. Un primer paso lo dimos en la acción unitaria en las calles el 20 de octubre. Hay que profundizarlo para rodear de apoyo cada lucha y para ganar fuerza e imponer el paro y plan de lucha provincial y nacional.
Este tema y otros queremos discutirlos con vos en las asambleas abiertas del PTS-FIT que convocamos este 11 y 12 de noviembre, en Libertador Gral. San Martín y en San Salvador. Te esperamos.