Después de 4 años sin funcionar, la Franja Morada se puso de acuerdo con la JUP, el MNR y el frente donde confluyen La Cámpora, La Mella, Miles, el PCR, el Partido Comunista y el Movimiento de Participación Estudiantil para convocar a un nuevo congreso de la Federación Universitaria Argentina.
Luego de tanto tiempo, con una pandemia, crisis y ajuste de por medio, cualquier estudiante universitario -que sepa que existe la FUA- podría pensar que el temario propuesto para el nuevo congreso sería amplio y diverso. Pero no. Radicales, peronistas y kirchneristas se pusieron de acuerdo para que no se discuta sobre la realidad de los estudiantes, la enorme lucha que llevaron y están llevando a cabo lxs residentes y concurrentes o el ajuste en la educación de la mano del FMI y el Frente de Todos. Lo único que se discutirá es la renovación de autoridades.
Por su parte, los espacios politicos y diputados ligados a la Franja Morada (Emiliano Yacobitti), La Cámpora (Máximo Kirchner) y La Mella (Itai Hagman) se pusieron de acuerdo hace algunas semanas para votar un presupuesto que ajusta aproximadamente el 15,5% para la universidad a pedido del FMI. Hay que dejar de buscar consensos como reclama una parte del arco político, están acá.
La rosca y los porotos
La FUA es dirigida por el radicalismo desde 1983. En el último congreso del 2018 la Franja obtuvo 310 votos, la JUP 275 y el frente dirigido por La Cámpora consiguió 240. En el caso de que se confirme la alianza entre la JUP y el resto de las agrupaciones kirchneristas, el peronismo tendría posibilidades de juntar los porotos necesarios para conducir la federación por primera vez en 40 años.
La convocatoria a un nuevo congreso, por lo tanto, tiene como fin exclusivo definir cuál va a ser la conducción de la federación. En ese marco, el “poroteo” se intensifica y con él, todo tipo de maniobras que pusieron en crisis el acuerdo histórico entre el radicalismo y el peronismo en la federación.
La FUA representa a los centros de estudiantes de las 57 casas de altos estudios nacionales; y su funcionamiento se organiza a través de una Junta Ejecutiva compuesta por nueve integrantes (3 de la Franja Morada, 1 MNR, 2 de la JUP, 2 de las agrupaciones kirchneristas y 1 del PO). En la última reunión de la Junta Ejecutiva se pudo ver como de un lado y del otro se interpretaban artículos del estatuto a piacere con el único fin de obtener más delegados.
El primer artículo violado por la conducción de la federación es el 8°, que sostiene que “El Congreso Nacional es el órgano máximo de la F.U.A .y deberá reunirse en sesión ordinaria vez cada dos años (...)”. El motivo de su postergación por más de 4 años según la Franja Morada fue la pandemia. Ahora bien, resulta raro que la “excusa” del coronavirus sea útil para algunos casos pero no para otros, ya que el radicalismo no quiso aceptar las actas de centros de estudiantes que sean más antiguas de lo establecido por el artículo 10° del estatuto: 18 meses previo a la convocatoria del congreso. Republicanismo de cartón.
Por su parte, el peronismo/kirchnerismo con el fin de obtener más delegados también utilizó la pandemia para justificar la presentación de actas del año 2018 (hace 4 años) y hasta incluso buscó hacer pasar una reunión virtual por la plataforma meet como una votación para centro de estudiantes. Frente a la imposibilidad de hacerlo, se retiraron de la reunión dejando abierto un escenario incierto sobre qué es lo que sucederá con el próximo congreso y la federación.
Desde la Juventud del PTS, frente a este escenario de maniobras y poroteo, además de denunciarlo propusimos un criterio diferente basado en los principios democráticos y de independencia política. En primer lugar, si la conducción de la FUA utiliza la pandemia como excusa para no convocar un congreso durante más de 4 años debido a la situación excepcional, se debería, por lo menos, contemplar esa situación excepcional con la fecha de las actas presentadas. Es por eso que propusimos que se acepten las actas desde el año 2019 (de forma excepcional debido a la pandemia) y no de fechas anteriores como proponia el kirchnerismo/peronismo para maniobrar y juntar más delegados. Esta propuesta fue presentada al resto de la izquierda (PO, MST e IS) con el objetivo de pelear una posición independiente de forma unificada, pero fue desoída por el Partido Obrero, que frente a la retirada del peronismo de la reunión terminó dándole quórum a la Franja Morada. Si bien la propuesta de los compañeros fue que se convoque a otra fecha de reunión, era evidente la negativa a esta idea por parte de los radicales. Al quedarse, los compañeros del Partido Obrero se convirtieron en un una pieza clave para el reformismo permitiendo que se continúe tal y como quería la Franja Morada. Creemos que es un error táctico importante que nos obliga a debatir cuál tiene que ser la política de las organizaciones revolucionarias al interior de las federaciones, centros de estudiantes y el movimiento estudiantil, debatiendo también los balances de otras experiencias, como la co-conducción con La Cámpora y La Mella de la FUBA.
Que tipo de federación necesitamos
La necesidad de cambiar este modelo de Federación que relega el rol de nuestras herramientas de organización a meros engranajes del régimen universitario, el Estado y los partidos políticos para sostener una universidad precarizada y un movimiento estudiantil pasivo, es urgente.
Desde la Juventud del PTS sostenemos que es necesario refundar la federación para que el movimiento estudiantil sea un actor activo en medio de la crisis en curso. Para hacerlo, es necesario retomar las mejores tradiciones del movimiento estudiantil como los cuerpos de delegados y las asambleas. Que busque coordinar y tender lazos con el movimiento de desocupados, trabajadores ocupados y precarizados. Queremos que la FUA y los centros de estudiantes sean las herramientas de debate y organización para pelear para que nadie se quede afuera de la universidad y que discuta cómo enfrentar el acuerdo con el FMI a lo largo y ancho del país. Que sea una federación que acompañe las luchas en curso como las importantes movilizaciones que vienen llevando a cabo miles de concurrentes y residentes en defensa de sus derechos y de la salud pública. Que discuta de forma democrática a dónde destinar los conocimientos que se producen en nuestras universidades para que estén al servicio de las necesidades de los trabajadores y el pueblo pobre y no de las mineras, multinacionales y empresas contaminantes. Esa es la pelea que estamos llevando a cabo desde la red de agrupaciones que impulsamos desde la Juventud del PTS en 23 universidades de todo el país.
Para enfrentar el modelo radical y peronista de la FUA necesitamos una poderosa alianza con les trabajadores y sectores populares, que solo lo puede expresar un agrupamiento independiente de los partidos de los empresarios y del régimen universitario. Por eso llamamos a los compañeros del PO, MST, IS, NMAS y el resto de organizaciones de izquierda a formar un polo que actúe de forma diferenciada tanto de la Franja Morada, como de las agrupaciones peronistas/kirchneristas.
Creemos que este agrupamiento se tiene que basar en un programa 1-En base a la independencia política de la Federación de todos los gobiernos y la iglesia y las autoridades de la universidad. 2- Contra el FMI. 3-Junto con los trabajadores en sus luchas. 4- Por un cambio en los estatutos y la práctica de la Federación que fomente la participación estudiantil y la toma de decisiones en asambleas, cuerpos de delegados, y comisiones, retomando las mejor experiencias del movimiento estudiantil. 5- Por la democratización de los órganos de cogobierno en base a la mayoría estudiantil y el claustro único docente. |