El paro de camioneros comenzó el 21 de noviembre y fue convocado por la Confederación Gremial de Transportistas Fuerza del Norte, quienes no están alineados a los grandes gremios de camioneros que hemos estado acostumbrados, pero aun así son dirigidos por sectores de derecha que buscan instalar algunas de sus demandas. Entre los puntos importantes del paro, el gremio solicita una rebaja durante cuatro meses del 15% en el precio del diésel. Otro de los puntos claves es el retiro de las 31 querellas presentadas por el gobierno por la antidemocrática Ley de Seguridad del Estado hacia camioneros (En Arica 2 casos, 4 en Tarapacá, 7 en Antofagasta, 5 en Atacama, 3 en Coquimbo, 6 en Valparaíso, 2 en la RM y 2 en O´Higgins).

Los camioneros rechazaron la negociación del día jueves, luego que el gobierno no accediera al retiro de las querellas que había presentado. “Pusimos una condición para la protesta pacífica: que no hubiera querellas involucradas con nuestros dirigentes y nuestra gente. Estábamos de acuerdo en ese punto pero (Manuel Monsalve) nos ha comunicado que eso no ha sido posible, o no se ha acordado, por lo tanto se interrumpieron las conversaciones”.

Uno de los aspectos que diferencia a esta movilización de otros paros de camioneros, es que esta vez las confederaciones más grandes, acogieron la propuesta del Ejecutivo de congelar durante 3 meses el precio del combustible y además inyectar mayores recursos para el Mecanismo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Mepco). Entre quienes llegaron a un acuerdo previo se encuentran la Confederación Nacional de Dueños de Camiones, la Confederación Nacional del Transporte de Carga de Chile(CNTC), Chile Transporte y la Federación Nacional de Buses de Transporte de Pasajeros, quienes aceptaron el trato con el ministro de Hacienda, Mario Marcel.

La Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), compuesta por el gran empresariado, rechazó el paro camionero y llamó al gobierno a utilizar la fuerza pública y la mano dura para despejar las carreteras que se encuentren obstaculizadas por el paro. A esto se sumaron empresarios de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), debido a los costos que podrían ocasionar esta movilización, “Si no terminan este paro hoy día la verdad es que nosotros, que somos los que les damos su salario, les pagamos su flete, vamos a tomar medidas que van a ser drásticas”. Todo esto expresa una fragmentación dentro del paro camionero que actualmente se desarrolla.

El paro sigue luego de reunión con el gobierno

Luego de la reunión de este sábado que duró aproximadamente 7 horas entre el gobierno y los camioneros, el presidente de Transportistas Fuerza del Norte, Cristian Sandoval, dijo que la principal diferencia sigue siendo en materia de combustible, donde el gobierno no piensa en bajar su propuesta.

“Nosotros tenemos que esperar que el Gobierno pueda sensibilizar con nosotros, y pueda fijar una fecha para poder volver a negociar. En estos momentos el Gobierno dijo que no había ninguna negociación en cuánto al combustible“, afirmó Sandoval, desconociendo al mismo tiempo el acuerdo previo donde el Ejecutivo planteaba US$ 1.500 millones para fijar el precio del combustible durante 3 meses.

Las movilizaciones continúan, pero lejos de representar verdaderamente a los choferes, quienes corren múltiples riesgos producto de sus precarias condiciones laborales(no se les respeta el descanso, no existen estaciones para descansar con baño o cocina, mantienen contratos precarios, etc ), se mantendrán dirigidas por las asociaciones gremiales que mantienen una política de derecha, que solo paralizan buscando satisfacer sus propios intereses, acumular mayores ganancias y presionar al gobierno para fortalecer la agenda securitaria, la cual ha mantenido Boric durante sus primeros 8 meses de gobierno.