Uno de los objetivos que declaró Gabriel Boric en medio de la entrega de estos 227 vehículos, fue que ya para el año 2026 el gobierno financiará el recambio de todos los autos que son utilizados.

Bajo la premisa de "recuperar los espacios públicos" es que el gobierno hace de este hecho un acto de Estado y se sigue comprometiendo a financiar a una de las instituciones más corruptas de los últimos años. Es cosa de hacer un poco de memoria, y recordar el caso del Paco Gate, donde hasta el día de hoy continúa en impunidad y con información no esclarecida para uno de los fraudes más grandes al Estado y al Fisco por sobre 27 mil millones de pesos.

Por otro lado, solo hace algunos días también era el mismo gobierno que en sus discursos políticos y a lo largo de diferentes actividades conmemoraron el día internacional de los Derechos Humanos, callándose la boca a las violaciones de Derechos Humanos ejercidas por Carabineros durante la rebelión de 2019 e ignorando completamente la situación de los presos políticos que aún continúan tras las rejas. No solo en esto han respaldado a Carabineros, sino que al mantener a Ricardo Yañez como cabecilla de esta institución corrupta y violadora de los DD.HH, se ha mostrado como una señal política importante.

Asimismo, el renovar la flota de esta institución a la par de entregarles mayores herramientas, para combatir la delincuencia y recuperar los barrios, no es más que una política criminalizadora que busca legitimar, el reprimir y perseguir a quienes producto de la pandemia y la crisis económica han perdido sus empleos formales, o por la inflación que ha azotado los precios de los alimentos se han visto en la obligación de producir más ingresos para sus familias, han sido tildados por los gobiernos locales y el central, como estorbos que deben ser sacados para limpiar y recuperar los barrios, en medio del azote de la crisis económica a las familias trabajadoras.