Los trabajadores municipales vienen luchando por el pase a planta permanente desde hace más de 5 años. Producto de la lucha, consiguieron que las autoridades locales convoquen a un concurso este martes por la mañana en el Instituto Pellegrini para poder alcanzar esta condición. Los empleados públicos lo aceptaron aunque su reclamo inicial es que el pase a planta sea directo, ya que concursar implica poner a prueba la idoneidad de los aspirantes al puesto. “Los trabajadores municipales venimos haciendo este mismo trabajo en algunos casos hace más de 15 años, ahora para categorizar y pasar a planta permanente debemos demostrarlo”, adelantó para este medio una trabajadora social.
Sin embargo, para su sorpresa, se encontraron con que no todos podían participar. Había 300 cupos y 221 inscriptos, de los cuales 73 quedaron afuera sin ninguna explicación oficial. Quienes no pudieron concursar en su mayoría son mujeres que fueron parte de la lucha para conseguir el pase a planta permanente. De esta manera, se podría deducir que es un claro ataque de persecución sindical.
Está situación provocó mayor bronca. Si bien un sector se presentó al concurso, otro en solidaridad no entró e hicieron un corte sobre la ruta 25 frente al lugar donde se pretendía realizar el certamen. Los presentes lograron impedir este escandaloso y fraudulento evento.
Por la tarde varias enfermeras denunciaron a La Izquierda Diario que, por correo electrónico, les llegó un cuestionario donde las autoridades municipales adjudicaban que, “por culpa de los violentos”, el concurso se iba a desarrollar vía e-mail. En su intención de enfrentar y así dividir a los trabajadores para romper la organización, desde el municipio se inició una campaña de miedo con amenazas de sanciones, descontar el presentismo o el día.
Desde hace semanas, los trabajadores de la salud vienen elevando sus reclamos al municipio del intendente Federico Achával, sin conseguir respuestas. Las marchas que realizan los días lunes en el municipio vienen siendo ignoradas. Parece que al alcalde del Frente de Todos no le parece vergonzoso que sus empleados cobren un básico de 44 mil pesos, muy por debajo de la canasta básica.
En las dos últimas movilizaciones se sumaron los médicos de los centros de salud de Pilar y hospitales locales porque la precarización abarca todos los sectores. En una entrevista para este medio Claudio, médico del distrito desde hace 30 años, expresaba: “Estamos en uno de los municipios más ricos de Argentina mendigando salud.”
Los sindicatos de CICOP, ATE y el sindicato municipal, hacen poco por conquistar las demandas, y no llaman a un paro por el pase a planta permanente, afirman los trabajadores. Los trabajadores consiguieron un bono, conquista de las movilizaciones y las asambleas que se vienen haciendo, pero no resuelve los reclamos. La inflación derrite los bajos salarios.
En CABA, la marea blanca viene de dar una ejemplar pelea por conquistar mejoras en salud. Antes fueron los trabajadores del neumático y ahora se empieza a trasladar a la provincia la necesidad de organizar y coordinar las fuerzas de los profesionales de la salud. Esta pelea se da en un contexto de vaciamiento y deterioro de la salud pública. Mientras el gobierno destina millones al FMI y a subsidios a las grandes empresas, los trabajadores y usuarios reciben un ajuste que, no solo se expresa en bajos salarios y pluriempleo, sino también en el impedimento a un acceso integral al derecho a la salud.
Es correcto avanzar en acciones comunes como se vienen realizando, pero también es necesario construir un gran encuentro nacional de coordinación y unidad de todas las luchas, para arrancarle a las centrales sindicales un verdadero paro nacional y plan de lucha. | 
