El hecho ocurrió hace un año en el territorio recuperado por la comunidad en Cuesta del Ternero, cerca de El Bolsón. Los jueces dijeron que Diego Ravasio y Martín Cruz Feilberg (empleados del empresario Rolando Rocco) asesinaron a Garay, a la vez que dejaron en grave estado a Gonzalo Cabrera. La pena se conocerá en los próximos días. La campaña antimapuche al desnudo.
Este miércoles el Tribunal de juicio de Bariloche integrado por los jueces Gregor Joos, Bernardo Campana y Marcos Burgos declaró culpables a Diego Ravasio y Martín Cruz Feilberg por el asesinato de Elías Garay (29) y el intento de asesinato de Gonzalo Cabrera (26), ambos jóvenes mapuche de la Lof Quemquemtrew, comunidad que había recuperado parte del territorio en la zona de Cuesta del Ternero, cercana a El Bolsón (Río Negro).
Los hechos ocurrieron el domingo 21 de noviembre del año pasado, cuando Ravasio y Cruz Feilberg ingresaron, con permiso de la Policía de Río Negro, al territorio recuperado y sobre el que hay un proceso judicial abierto. Allí enfrentaron prepotentemente a miembros de la comunidad y, luego de un intercambio de palabras, descargaron a corta distancia varios disparos con una carabina calibre 22. Una de las balas atravesó el tórax de Garay, quien murió a los pocos minutos, y otras dos terminaron en el abdomen de Cabrera, que debió ser internado y operado de urgencia.
El juicio contra los dos sicarios (que formalmente cumplían tareas para el empresario forestal antimapuche Rolando Rocco) comenzó el 17 de noviembre último en los Tribunales de Bariloche. Allí los jueces Joos, Burgos y Campana escucharon a testigos, peritos, a los fiscales Francisco Arrien y Betiana Cendón y a las y los abogados de las partes. La querella (familia de Garay y el propio Cabrera) está patrocinada por les abogades Andrea Reile y Ezequiel Palavecino. A Ravasio lo defiende el abogado oficial Nelson Vigeras (antes lo defendía el dirigente del Frente de Todos Estanislao Casaux, pero por algún motivo desconocido renunció) y a Cruz Feilberg el doctor Ernesto Saavedra.
“Están probados los hechos”
En otras notas de La Izquierda Diario se detalló gran parte de lo acontecido aquel domingo en la Lof Quemquemtrew. Además de los valiosos testimonios de la comunidad mapuche, los mismos asesinos dieron en sus declaraciones indagatorias varios indicios de cómo y por qué llegaron a cometer el crimen.
Además, quedó desmotrada la complicidad de la Policía de Río Negro en el hecho, ya que sin el permiso para atravesar los retenes que el gobierno había puesto para “aislar” a la Lof no podrían haber llegado a estar cara a cara con sus víctimas. Y tampoco habrían podido irse a sus casas como si nada una vez cometido el crimen. A su vez, está comprobado que poco antes del crimen la propia fuerza represiva había registrado el territorio con un dron, cuya existencia se desconoce luego de que la Policía dijera que “se perdió”.
En el juicio que está terminando (cuyas audiencias fueron por Zoom), esas pruebas volvieron a ser expuestas. Y se incorporaron más evidencias que demostraron la voluntad de matar de Ravasio y Cruz Feilberg, así como la complicidad del empresario Rocco y de la Policía. La condena a ambos sicarios debería abrir nuevas causas contra sus cómplices. Algo que pocos creen que pueda suceder, a la luz de la campaña antimapuche que recorre al todo el régimen político-judicial, con los últimos hechos en Villa Mascardi como muestra.
Para los jueces Campana, Burgos y Joos, tanto el homicidio de Garay a manos de Ravasio y el intento de hacerlo con Cabrera “están probados”, por lo que el hombre oriundo de Esquel merece la condena por homicidio doloso, ya que disparó voluntariamente y desde cerca a los centros vitales de ambos jóvenes. En el caso de Cruz Feilberg, para los jueces debe ser condenado por homicidio culposo, ya que sabiendo de las consecuencias del accionar de su colega, no hizo nada para evitarlo y actuó siempre acompañándolo.
Según el Tribunal, lo que no hubo fue un “plan” para asesinar a Garay y Cabrera, lo que en los hechos no sólo es un atenuante para los imputados sino que “corta” la cadena de responsabilidades. En ese sentido, el abogado Palavecino dijo a la periodista Adriana Meyer de Página|12 que los testimonios y las evidencias demostraron que “fueron con intención de matar, lo planearon” ya que necesitaban “matar a los mapuche por su actividad económica”.
“Lo importante es que hubo condena de los dos homicidas, la sentencia es que son penalmente responsables por el hecho del que fueron acusados, las minorías siempre tenemos que pelear más y probar lo obvio, y en este caso se logró”, agrega Palavecino, abogado de muchas causas populares y miembro de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) de Río Negro.
Según el Código Procesal Penal de la provincia patagónica, los veredictos se dividen en dos partes. Primero los jueces determinan si los hechos analizados en el juicio fueron probados y quiénes fueron los culpables. Posteriormente, en otra audiencia, se determina el tipo de pena que les cabe. Según lo estipulado, luego de la audiencia de este miércoles los jueces abren un período de cinco días para que fiscalía, querella y defensas aporten más pruebas (si es que quieren). Luego de eso, el Tribunal fijará la pena para Ravasio y Cruz Feilberg.
Desde la querella confirmaron que harán uso del plazo abierto desde el miércoles para aportar “más elementos” que ayuden a conseguir el máximo de la pena prevista para delitos como los certificados en el juicio.
Tras conocer la sentencia condenatoria, la madre de Elías Garay, Juana Cayicol, habló con la prensa. “No puedo decir si estoy conforme o no con lo que escuchamos hasta ahora en el juicio. Conforme voy a estar el día que se aclare bien lo que pasó y paguen los culpables”, afirmó la mujer mapuche, según publicó el sitio El Chubut.