“Tucumán Arde”, centro cultural político socialista que funcionará en San Juan 1015, ex Casa Managua. Este espacio es impulsado por el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) y el Frente de Izquierda. Desde las 20, con una variada grilla de músicos y exposiciones. |
Este viernes 16 de diciembre, desde las 20, se inaugura “Tucumán Arde”, centro cultural político socialista que funcionará en San Juan 1015, ex Casa Managua. Este espacio es impulsado por el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) y el Frente de Izquierda.
“Con mucha alegría cerramos el año inaugurando ‘Tucumán Arde’, un espacio que apostamos a que funcione como un centro para que los jóvenes, las mujeres y los trabajadores puedan organizarse en sus peleas y al mismo tiempo también sea un lugar para poder disfrutar de las múltiples expresiones culturales de la provincia. Esto forma parte de las iniciativas del PTS en el Frente de Izquierda para ampliar la influencia de la izquierda, como hicimos en las 100 asambleas simultáneas en todo el país donde participaron miles de compañeras y compañeros. Ahora encaramos este proyecto, como parte de los desafíos que tenemos en medio de la crisis”, aseguró Alejandra Arreguez, dirigente provincial del PTS-Frente de Izquierda.
En la inauguración hay una grilla que reúne diferentes estilos musicales, con la presencia de Ale Nicolau, Sulka Wara, Estrella Negra, Vicios Punk, Indios Cansinos y Zacarías. Además también expondrán Gabriel Alfredo Martín, Virginia, Lu Elsinger y Ale Nicolau. También se presentará un adelanto de una producción audiovisual de La Izquierda Diario sobre los cosecheros del limón.
Más información puede consultarse en la cuenta de Instagram.
La experiencia de “Tucumán Arde”
El nombre del nuevo centro cultural político socialista remite a la experiencia de “Tucumán Arde”, una muestra multidisciplinaria, instalada en noviembre de 1968 en los locales de la CGT de los Argentinos en Buenos Aires y Rosario.
Allí confluyeron, por un lado, intelectuales e investigadores que documentaron los efectos devastadores del cierre de los ingenios azucareros de Tucumán impuesto por la dictadura militar de Onganía en 1966. Por otro lado, un grupo de artistas que buscaban un impacto político en la denuncia de la pobreza, el hambre y la explotación en el azúcar.
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