Con parsimonia en las definiciones políticas, con exaltados ataques de furia oligárquica en el editorial sin firma que asume La Nación o inteligentes apelaciones a la memoria de la clase media, este domingo los editorialistas pretenden llevarse tranquilos el asado a la boca o ver sin sobresaltos el partido, mientras saben que han colaborado en el análisis del movimiento de las piezas del ajedrez electoral que se juega de cara al 25 de octubre. Previsible.
Un domingo sin definiciones rimbombantes, a siete semanas de las elecciones los principales editoriales pelean el significado del momento polìtico, agarrando, significando y resignificando las noticias de la ùltima hora. Van der Kooy, hablando acerca de las renovadas urgencias electorales de Scioli nos dice por Clarín: "¿Cuáles? Capturar seis puntos nacionales, que deberían salir de los centros urbanos y de Buenos Aires. Geografías donde no quedaría tanto kirchnerismo por exprimir. Donde, por otra parte, el viejo peronismo antes que seducir, espantaría. Scioli sigue tentado de polarizar con Macri sin reparar que Sergio Massa retendría aún los votos del peronismo disidente que necesita para el salto final. Los dilemas se multiplican para el gobernador. Habría tomado conciencia de que octubre no será para él ningún paseo".
Morales Solá en La Nación pone el blanco sobre el ocultamiento de la política de "los principales" candidatos en el litigio con fondos buitre, y en la necesidad burguesa de volver al mercado de capitales y al endeudamiento externo. Escribe que "El problema de Macri y de Scioli es que el conflicto irresuelto con esos fondos se convirtió en el mayor obstáculo para resolver los muchos problemas de la economía argentina (...) y que "Macri negocia ya por convicción y Scioli también lo hace ya por necesidad, pero se trata sólo de las razones de cada uno. No modifica la decisión central: ir en busca de un acuerdo con los fondos buitre para volver a tomar crédito en el exterior".
Tucumán y después
Apaciguada la bronca popular que expresaban las movilizaciones anti-fraude del pueblo tucumano y sincerado que "fraude y clientelismo hacemos todos", volvemos a la política tras bambalinas, donde las desgracias ajenas son motivo para descorchar y todo se convierte en moneda de cambio. Desde aquella conferencia de prensa post escándalo de "fraude patriótico" en el Jardín de la República, es Clarín quien viene encargándose de publicitar los chat, llamadas y mensajes entre los candidatos de la oposición. "De la Sota, dicen, fue el primero en enterarse de los recurrentes chats entre su socio y el líder del PRO, revelados por Clarín hace una semana, que alimentan los rumores de un acuerdo para después del 25 de octubre. La relación es tal que Massa, Malena Galmarini y sus hijos dormían anoche en la casa del mandatario, en Río Cuarto. “Tienen una estrategia, una táctica común para que no gane el Gobierno”, dicen en el entorno del gobernador de Córdoba. Cuentan que días atrás, a De la Sota le pasaron una comunicación “muy importante”. Era Scioli. “Acá estoy, con Sergio. ¿Querés saludarlo?”, habría chicaneado De la Sota a su par bonaerense.", publica hoy el editor Santiago Fioriti
Massa, un conocido adicto de la embajada norteamericana entraría en cualquier esquema si a lo que jugamos es al ballotage.
Mientras Scioli, que efectivamente debe estar preocupado en la forma de conquistar los puntos que le faltan para evitar ese ballotage, anuncia un bosquejo de gabinete: ex gobernadores, intendentes y funcionarios propios bonaerenses. Se debate entre demostrar autonomía o reforzar "la continuidad con cambios"; eso sí, como ya nos tiene acostumbrados, sin hacer maniobras muy jugadas para llegar lo mejor posicionado a octubre. Sobran las razones para que no prime la seguridad entre los candidatos. Ni las inundaciones, ni la crisis ante el escandaloso fraude en Tucumán, ni el asesinato de un militante de la UCR en Jujuy, ni las denuncias de corrupción o enriquecimiento mueven mucho el amperímetro, ni hacen perder caudal de votos significativos al oficialismo. Pero tampoco permiten subir las intenciones. Las encuestas siguen circulando sobre los mismos números y la conclusión es que, de mantenerse esos números, habrá segunda vuelta.
Reseña Julio Blanck en Clarín: "(Scioli) No puede enemistarse con Cristina a siete semanas de la elección, arriesgándose a la represalia kirchnerista y a la eventual pérdida de votantes que responden con disciplina a las órdenes de la Casa Rosada. Pero tampoco puede quedar adherido sin matices a la Presidenta porque ese seguidismo, que le sirvió para llegar a la candidatura, puede impedirle la conquista de los muchos votos que necesita sumar para ser presidente. No hay una solución fácil para esa encrucijada. De cómo se resuelva depende la diferencia entre ganar y perder. (...) Con fe, con optimismo. Scioli hizo al sciolismo a su imagen y semejanza. Esa puede ser su gloria o su condena".
Al centro político
Lo que dibujan las deslucidas edioriales del domingo es aquella paradoja que desde este diario supimos definir como un escenario donde hay "un candidato que evidencia un oficialismo en retroceso y que no “enamora” y una oposición que compite por parecérsele lo más posible".
Así lo evidencia otra nota publicada por el diario de Mitre, y se pregunta: "Bla, bla, bla, bla". ¿Es cierto que los principales candidatos a presidente, Daniel Scioli (Frente para la Victoria), Mauricio Macri (Cambiemos) y Sergio Massa (UNA), hablan sin decir demasiado? Algunos ciudadanos se quejan porque repiten frases como "con fe y esperanza", "juntos podemos vivir mejor" o "el cambio justo", sin precisar a qué se refieren. Y no terminan de explicitar qué van a hacer (ni cómo) en las principales áreas de gobierno en caso de ganar los próximos comicios de octubre".
El fin de ciclo latinoamericano y un relato trifrontera
Mientras tanto en otro lugar de la Ciudad, la redacción de Página 12 sigue buscando como seguir recreando el relato. Hoy con renovadas fuerzas, la hinchada de Scioli, le hizo poner la cara a Lula para intentar "ganar puntos".
Mientras lo que se profundizan son los turbulentos días de Brasil, una extensa "entrevista" al ex presidente carioca endulza el relato para seguir sosteniendo esa idea de que todo lo demás, puede ser peor. En tono apocalíptico Carta Abierta anuncia en el mismo diario: "Buscan, siguiendo un libreto largamente experimentado y probado en otros países de Sudamérica, arrojar los procesos democrático populares al vertedero de la historia, convirtiéndolos en formas espectrales que sólo nos recordarían un tiempo de indigencia política, económica, institucional y social".
En tono más doméstico Lula dice: "Quiero que gane las elecciones alguien que quiera mantener una buena relación con Brasil. Alguien que vea a Brasil como socio y no como adversario. Que quiera acrecentar la relación comercial, política y científica entre los dos países. Por eso no debe haber retroceso. Ya sufrimos la era militar. Ya vivimos la etapa de Carlos Menem y Fernando Henrique Cardoso, cuando fueron desmontados el Estado argentino y el Estado brasileño. Después pasamos por momentos de dificultades pero más tarde vino la bienaventuranza para nuestros pueblos. Hoy el momento es difícil. Ahora tenemos que buscar más que nunca esa aproximación".
Lo cierto es que no todo es viento favorable a los pos-neoliberales en el Cono Sur, y los procesos que ayer se ponían como ejemplo hoy enfrentan el descontento de amplios sectores de trabajadores que anuncian no estar dispuestos a perder posiciones conquistadas. La enorme huelga docente que sacudió al gobierno frenteamplista de Uruguay, hizo retroceder su decreto anti huelga; continúan las combativas manifestaciones de obreros automotrices en Brasil; y las luchas que protagonizan trabajadores de distintos sectores en Argentina avisoran escenarios turbulentos.
Estas son demostraciones que tenderán a acrecentarse y el próximo gobierno argentino es un timón difícil para quién lo tenga que agarrar.
El diario no hablaba de ti
Como nos tienen acostumbrados las editoriales del domingo no gastan esfuerzo en reflejar aquello que viven los trabajadores. Desde La Izquierda Diario venimos lavantando las denuncias de trabajadores que se multiplican desde todo el país, porque es de manual que cuando se habla de crisis las patronales aprovechan para anticiparse. En la industria automotriz la recesión de Brasil, pero también por el estancamiento interno, ya es el argumento para las suspensiones. Como ya se ha denunciado en este diario: "La FIAT que desde el mes de Julio trabaja entre tres o cuatro días a la semana, tiene previsto un plan de suspensiones para Septiembre", también en la alemana Volkswagen, la General Motors, en la zona norte de GBA, la estadounidense Ford aplicará 170 suspensiones rotativas hasta fin de año y pesa sobre Paraná Metal (otra) amenaza de cierre.
También arrancaron la semana con suspensiones en FATE, que como denuncian sus trabajadores: "el empresario Madanes junto a otros sectores de industriales viene presionando al gobierno para que realice una fuerte devaluación del peso, ya que dicen “perder competitividad” con Brasil" . Ya hay medidas de similares características en otras ramas de la industria, como en la Alimentación de Mendoza en donde trabajadores de 3 plantas de ALCO enfrentan suspensiones y despidos.
Mientras tanto en Misiones se define por estas horas la continuidad de una histórica huelga de la docencia, que se mantiene firme en un conlicto con el gobierno provincial. Los sindicatos docentes recibieron este sábado una nueva propuesta de recomposición salarial del gobierno provincial. Una asamblea pública en la Plaza será la que define cómo sigue. En caso de mantenerse el conflicto, el Sindicato de Camioneros ya expresó su compromiso de llevar adelante un paro en la rama del transporte de combustibles. La medida de fuerza en solidaridad golpearía los intereses del grupo económico del gobernador Maurice Closs, que es dueño de la empresa Petrovalle, la proveedora de combustibles del gobierno provincial, y uno de los "nominados" para un eventual gabinete de Scioli.
Buscan que la crisis la paguen los trabajadores. Hay que enfrentarlos con la fuerza de los trabajadores, las mujeres y la juventud. |