Acá no se rinde nadie: por inmensa mayoría la asamblea portuaria votó defender a los 5 trabajadores despedidos y que nadie entra sin ellos. La UIA presiona por derrotar la huelga: son momentos decisivos. Entre todos los sindicatos y organizaciones solidarias hay que bancar el piquete y la vigilia para que este lunes el puerto siga parado. Es necesario un paro regional de la CTA y la CGT para apoyar a las familias del puerto.
Enero arrancó movido y hay que ir la hueso: las patronales quieren quebrar la lucha portuaria. Pero los obreros y sus familias se les paran de mano: el puerto rosarino, dirigido por los estafadores de Vicentin y la chilena Ultramar, sigue parado, con piquetes en todos sus accesos. Y las patronales nucleadas en la Unión Industrial Argentina ponen el grito en el cielo: quieren que liberen los accesos, que liberen los containers con sus insumos. Al costo que sea, pidiendo que declaren como una actividad esencial el trabajo portuario. Un apoyo abierto a los Nardelli, que tras un reclamo salarial respondieron con despidos y que los Ministerios de Trabajo -nacional y provincial- miraran para otro lado. El colmo fue que dictaron una conciliación obligatoria con los despedidos adentro que la empresa no acató, pero todo fue un "siga siga".
Pese a que los empresarios ganan millones con la actividad portuaria, miles de trabajadores y familias que siguen el conflicto por la TV no pueden entender porque tanta saña con los 5 trabajadores. En los piquetes había una esperanza de que ofrezcan una solución pero también desconfianza porque los que realmente laburan, los que paran la olla entre cubiertas quemadas todos los días no ven muy bien lo que viene haciendo la conducción sindical. Y tenían razón.
Este viernes el SUPA, el sindicato portuario, propuso hacer una asamblea para ¡otra vez! votar si entrar a laburar dejando en banda a los despedidos o seguir en la lucha. Pero las ilegalidades de la patronal, la desesperación de la UIA y la voluntad de lucha de los compañeros en varias asambleas demuestra que se puede ganar. El sindicato no debería patear en contra; mucho menos en los medios. Se tendría que poner la 10 de capitán, como Messi y decir que ’este grupo no los va a dejar tirados’. Entre cantos de "unidad de los trabajadores y al que no le gusta se jode" se votó masivamente continuar la lucha hasta reingresar todos. Aunque la asamblea fue clara y contundente, la conducción sindical planteó en los medios que el lunes podrán entrar a trabajar quienes quieran. Esto no es lo que votó la asamblea y en vez de enfrentar a una patronal que está más sucia que una papa, puede enfrentar a trabajadores contra trabajadores. El canto de la asamblea fue claro: unidad de los trabajadores. Si la UIA pone el grito en el cielo es porque tienen millones de dólares parados por nuestra lucha. Los portuarios tienen la sartén por el mango. Si se abandonan a los 5 compañeros, el resto entrará con la cabeza gacha y luego vendrán con su plan de fondo: las 8 horas.
Momentos decisivos: todos con los portuarios
Este jueves los trabajadores decidieron encadenarse en el acceso al puerto amenazando con prenderse fuego. Fue una medida desesperada en la que se expresó el cansancio de que negociación tras negociación no haya ninguna respuesta favorable. Hartos de los tiempos del estado y las patronales, que disfrutan de sus vacaciones en enero, patearon el tablero. Y con los despedidos al frente pero con cientos de trabajadores acompañando, volvieron a poner en la primer plana de todos los medios el reclamo obrero. Por la tarde, una conferencia de presa improvisada junto a Gustavo Teres de AMSAFE, Lorena Almirón de ATE y Diego Ainsuaín de Siprus, junto al apoyo de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos mostró el apoyo a la lucha contra los despidos.
Este fin de semana continua el acampe y la lucha portuaria. Este lunes será un momento decisivo: el sindicato asegura que quien quiera ingresar a trabajar, podrá hacerlo. Los trabajadores se mantienen firmes: convocan a todas las organizaciones a acompañarlos para sostener la huelga. Hay que rodear de solidaridad esta pelea. Todas las organizaciones sociales, políticas y sindicales, empezando por las combativas, tenemos que armar una vigilia para que nadie entre a trabajar. AMSAFE, la CTA, SIPRUS y los sindicatos que apoyan la lucha tienen una fuerza enorme para apoyar: hay que bancar los piquetes para sostener el paro.
La solución al conflicto en el puerto de Rosario es una sola: todos adentro o sigue la lucha. Para rodear de apoyo y solidaridad, para fortalecer la lucha contra los despidos, el paro regional de la CTA y la CGT es una medida concreta para derrotar a los empresarios. Si el puerto es de la provincia, fuera los Vicentin! Que el puerto lo maneje la provincia, con el control de los trabajadores para terminar con toda especulación.