El Instituto Mexicano de la Radio (IMER) celebra el Día mundial de la radio en medio del nepotismo, tráfico de influencias e inoperancia, lo que contrasta con el aumento de presupuesto que se le dio para este año desde el Gobierno Federal.
El Día mundial de la radio fue proclamado por la UNESCO para destacar la importancia de éste medio de comunicación en la sociedad, para el 2023 el tema es “Radio y Paz”.
Mientras en el mundo se destaca la importancia de la radio “como pilar para la prevención de conflictos y consolidación de la paz…”, en México la radio pública es abandonada y parece condenada a desaparecer.
Es el caso de IMER que ya había sobrevivido a las administraciones del PRI y PAN, y con la llegada de la Cuarta Transformación se pensó que se podría cumplir con “Garantizar el goce efectivo del derecho de acceso a información plural y diversa”, que es la misión del Instituto.
Pero directora de IMER, Aleida Calleja Gutiérrez ha repetido los vicios del pasado, con una política contra los trabajadores que se tradujo en despidos a trabajadores y el cierre de programas de radio.
Un trabajador sindicalizado brindó una reflexión sobre el organismo público aseguro; “El IMER está al borde del abismo… Parece más fácil su desaparición”, añadió, “…la competencia de Internet es un fuerte reto y en ésta administración no demuestra tener el talento necesario” para enfrentarlo.
Sobre el actuar de la dirección sentenció, “… impone sus proyectos de programas, nombra gerentes de emisoras y maneja dos estaciones, desplazando… a la dirección de radiodifusoras”.
“El IMER es un Frankenstein fundado por ensamble de instancias que ya existían y no embonan entre sí…”, dijo el trabajador que prefiere el anonimato, esto debe agregarse que el Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano (SPR) dirigido por Jenaro Villamil ha realizado convenios con el Instituto.
Pero también la administración de Villamil no ha estado exenta de corrupción, el caso más sonado fue la instalación de torres de transmisión que jamás se hicieron y por las cuales se han realizado las denuncias correspondientes.
El Instituto Mexicano de la Radio celebra este año su 40 aniversario, pero su futuro es incierto aun cuando el actual gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que para 2023 designo 271.4 millones de pesos de presupuesto un aumento considerable a los 159.2 millones de pesos otorgados en 2019.
Así el sindicalizado del IMER se lamenta que aún cuando existen dos sindicatos, SNTIMER y STIRTT, ninguno ha hecho algo por de denunciar la situación que viven los trabajadores, entonces en Día mundial de la radio pasará como una fecha con poco que celebrar por lo menos en las 17 estaciones del grupo que abarca todo el país. |