Este martes el ministro de Economía Sergio Massa continuó con su ronda de reuniones con distintos sectores industriales. La idea es mostrar un perfil activo mientras espera que la economía no le corte el sueño de postularse como candidato del Frente de Todos..
Pero algunos medios reflejaron su encuentro con el dirigente del gremio automotriz, Ricardo Pignanelli. Tras reunirse en la sede del SMATA, se conoció la posibilidad de que lleguen inversiones en el sector. Por un lado dos empresas para la fabricación de autopartes, una de capitales estadounidenses y otra de capitales argentinos con tecnología brasileña. Por otro, una terminal china que podría producir en el país.
Se sabe que el SMATA juega un rol clave en la negociación por inversiones automotrices. Las empresas del sector quieren garantizarse buena “rentabilidad” por lo que es clave qué condiciones de trabajo pacta con el gremio. Hoy la mayoría de las terminales tiene convenios por empresa e incluso los sigue flexibilizando como vimos el año pasado con la reforma laboral en Toyota.
Pero además aprovecharon para hablar de la situación del peronismo, hoy atravesado por una crisis no solo en su gestión sino también de cara a las elecciones de este año.
"Para ganar estas elecciones debemos estar unidos", dijo el dirigente sindical en una entrevista después de la reunión. "Si logramos frenar ese gran flagelo que es la inflación seguro triunfará el FdT en las elecciones de este año". Nadie le puede prohibir las ilusiones, pero el dato que se conoció el mismo día del encuentro parece un cachetazo al pronóstico de Pignanelli: 6% enero, 98 % en 12 meses.
El dirigente del Frente Sindical, aliado al moyanismo, se jugó un poco más: "Si la economía se endereza, el candidato natural es Massa”. Así mostraba cuál era uno de los objetivos de esa reunión. Posicionarse en los debates internos del peronismo en un año electoral. La idea de Massa es que el sindicalismo cegetista sea uno de sus aliados en la mesa política del PJ.
Lo que más sorprendió es el argumento para justificar su apoyo: “Massa le está poniendo toda la onda”.
La mayoría de los trabajadores y trabajadoras no piensa lo mismo. Incluso en su gremio. El Frente de Todos no para de desilusionar a quienes lo votaron esperando recuperar lo perdido, volver al asado de los domingos o mejores sus condiciones de trabajo y de vida.
Así no hay “onda” que alcance. | 
