¿Qué tiene que ver el AAPAUNAM con la precarización docente?
En la UNAM el 75% de las y los docentes son de asignatura, esto significa que no cuentan con estabilidad laboral pues cada semestre tienen que renovar su contrato y ganan entre 335.26 y 509.78 pesos por cada hora de clase impartida en un mes, por lo que al mes reciben entre 3 mil y 8 mil pesos de salario.
Además, entre los y las profesoras de asignatura hay aún más formas de contratación, lo que genera división entre la planta docente, pues para poder tener condiciones laborales no tan precarias, deben competir entre ellos y ellas.
Todo esto está estipulado en el Estatuto del Personal Académico (EPA) que establece las categorías académicas, los requisitos de ingreso y promoción, así como establece derechos generales y las obligaciones, y son la autoridades universitarias quienes regulan dichos derechos. El CCT que contiene los derechos laborales colectivos de los académicos, es la AAPAUNAM quien detenta su titularidad.
AAPAUNAM son las siglas de la Asociación Autónoma del Personal Académico de la UNAM, fue creado en 1974 por el entonces rector Guillermo Soberón Acevedo, en cuya administración la policía ingresó a la universidad para romper la huelga del STUNAM quien antes de 1980 era el sindicato no solo de los trabajadores administrativos como en la actualidad, sino también de los docentes.
El AAPAUNAM es un sindicato patronal porque, como explicamos en esta nota no está dispuesta a defender a sus agremiados, pacta salarios raquíticos, deja pasar los despidos simulados, injustifiacos y/o políticos, lo que por la vía de los hechos significa dejar que el patrón reprima a los trabajadores sin ninguna oposición.
Además rechazan toda forma de lucha de la clase trabajadora incluyendo la huelga como mecanismo para conquistar sus demandas, nunca escucharemos que cuestionan los privilegios de la casta dorada, porque son parte de la misma. A esto se suma que las y los trabajadores académicos no cuentan con asambleas sindicales por facultad ni escuela, ni son tomados en las decisiones de esta asociación.
No hay educación pública con docentes precarizados
Es muy común que les estudiantes no conozcamos las condiciones laborales bajo las cuales trabajan nuestros profesores y profesoras. Con la meritocracia académica, las autoridades universitarias pretenden normalizar el que las y los docentes compitan entre ellos y naturalizan frente al estudiantado que de eso se trata la vida académica.
Sin embargo, no hay manera de que exista una educación pública y gratuita con docentes sin condiciones dignas de trabajo. La precarización que viven no son tan distintas a las que mantiene una gran parte del estudiantado, pues para poder estudiar muches tienen que trabajar —sin hablar de todes les que no pueden estudiar porque trabajan y los miles que quedan excluidos año con año de la educación superior—, contando las monedas para que alcance para el transporte y para poder comer porque la universidad no garantiza ni siquiera esos servicios básicos.
Esta realidad no se restringe a la UNAM, a nivel nacional hay una enorme precarización de las labores que están relacionadas con la educación. No por nada hace unas semanas se fueron a huelga las y los trabajadores del Colegio de Bachilleres y más recientemente las y los docentes del IEMS.
Mientras tanto, entre 85 funcionarios de la UNAM pertenecientes a la casta dorada, se llevan al año 120 millones de pesos con sueldos mensuales que van de 80 mil a 193 mil pesos mensuales. Es claro que nuestra realidad como estudiantes es mucho más cercana a la de los docentes y los trabajadores de la universidad que a las vidas millonarias de las autoridades.
Por todo esto, desde la Agrupación Juvenil Anticapitalista apoyamos el llamado de la Asamblea de Académicos Unidxs para votar NO a la relegitimización del CCT del AAPAUNAM este 27 y 28 de febrero, pero sabemos que esto no es suficiente. Las autoridades hostigan y reprimen inclusive con despidos políticos a docentes que se organizan y denuncian la precarización como fue el caso de muchos que participaron en el movimiento UNAM No Paga.
Es urgente rodear de solidaridad la lucha de las y los docentes por condiciones dignas de trabajo a la par de avanzar en articular las demandas que tenemos los distintos sectores de la universidad pues solo así lograremos estar más cerca de conquistar una universidad controlada por nosotres y puesta al servicio de las grandes mayorías y no de una parasitaria casta de burócratas que son los responsables de pasar las políticas de organismos internacionales como el FMI y la OCDE para golpear el derecho a la educación y los derechos laborales de sus trabajadores.
En este mismo sentido abrazamos la lucha de nuestros compañeros y compañeras de la agrupación sindical de trabajadores académicos y administrativos Desde las Bases quienes impulsan la perspectiva de que el STUNAM debe ser un sindicato que esté al servicio de la lucha de las y los trabajadores y de la defensa de la educación pública y gratuita, apuntando a que este represente nuevamente tanto a trabajadores como a docentes. De esta manera podríamos avanzar en articular la organización y las demandas de dos de los sectores que hacen posible que día a día la universidad funcione. | 
