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Trabajadoras de la educación, de la salud, de programas sociales, de la UNAM, estudiantes de distintas universidades, de prepas, de secundaria, amas de casa, madres con sus hijas marcharon en el contingente de Pan y Rosas, como parte del Bloque Combativo impulsado también por sindicatos como el STNEA y el SUTIEMS.
Contra la Iglesia oscurantista, contra la violencia patriarcal, contra el despliegue de militares y de la Guardia Nacional en tareas del orden civil, hartas de la precarización laboral, de la indiferencia y de la criminalización del gobierno y del cinismo de la derecha, sus voces, sus pasos, su energía hizo vibrar las calles. |
